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La lucha por repintar el mural
Para que siga ardiendo...

Tras una serie de reuniones y luego de que las autoridades del Colegio San Jos?, en dos oportunidades taparan el mural de la Resistencia, el Colectivo de Ex Presos Pol?ticos propuso repintarlo junto a los padres y alumnos que deseen participar. A la espera de una respuesta por parte del Colegio, los militantes fortalecen la ilusi?n y la expectativa de, finalmente, plasmar en las paredes los 500 nombres que recuerdan a los militantes desaparecidos durante el Terrorismo de Estado y de los asesinados en el 2001. El mural adem?s homenajea al sacerdote Miguel Nicolau y a los siete ex alumnos desaparecidos del Colegio San Jos

Siete ex alumnos del Colegio San Jos? y un sacerdote de esta instituci?n est?n desaparecidos.

En su fachada, en la esquina de Espa?a y Salta, el Colectivo de Ex Presos Pol?ticos de Rosario pint? por primera vez un mural con todos los nombres de los militantes desaparecidos y tambi?n de las v?ctimas del 2001. Esto fue en el a?o 2007. Durante el 2004 y 2005 se le agregaron m?s nombres, se renov? la pintura, se lo fortaleci?. 

La memoria colectiva se plasm? en las paredes de esa esquina. Brocha, pincel y mate acompa?aron cada acto organizado por el Colectivo, cada pintada que se multiplicaba en otros sitios especialmente elegidos para recordar a los 30.000 militantes asesinados por el terrorismo de Estado.

El mural de la Resistencia es un emblema. Una imagen que se recuerda cada vez que se transita por aquella esquina. Es, adem?s, un homenaje al sacerdote Miguel Nicolau y aquellos estudiantes que se formaron en la escuela salesiana y que all? mismo, forjaron sus ideales y hoy est?n desaparecidos. 

 Una carta de un ex alumno de la escuela as? lo expresa: ?el padre Gilabert nos form?, incentiv? y ayud? a organizarnos como delegados en los cursos y conformar el cuerpo de delegados de la T?cnica primero y con este mismo esp?ritu, lo que fue el Consejo Asesor de la escuela, conformado por estudiantes (delegados), profesores, sacerdotes, no docentes, padres y alg?n laico, desde este consejo donde se debati? todo lo ateniente al colegio llegamos a establecer como uniforme de la t?cnica el guardapolvo (celeste) para evitar la discriminaci?n del saco, se discuti? y creo y se lleg? a implementar una retribuci?n monetaria a los alumnos aprendices de las escuelas de oficio por la producci?n que se hac?a en la escuela (imprenta, mec?nica,ect), se decidi? la toma del colegio en la ?poca de C?mpora, marchamos juntos (cerca de 600 estudiantes, sacerdotes, docentes, celadores, etc) para repudiar el golpe en chile, y as? muchas m?s cosas desde la formaci?n en estudiar la Biblia a trabajar en barrios carenciados. Sigo orgulloso de haber transitado por el colegio, por las ense?anzas de la congregaci?n y una sociedad que en una ?poca se propuso trabajar y luchar por la felicidad de los conciudadanos. (?) Las paredes fueron testigo y no son patrimonio exclusivo del presente. Utilizar las paredes para recordar esa rica etapa de un pasado con un compromiso acorde a esa ?poca, ni m?s buena ni m?s mala que la actual, es igual que pintar la imagen de Don Bosco.?

Sin embargo, las nuevas autoridades del Colegio decidieron, a fines del 2011, tapar, sin brindar explicaciones, esos quinientos nombres de personas desaparecidas con la imagen de Don Bosco.

Fueron numerosos los intentos de los integrantes de la organizaci?n para contactarse con el entonces director del colegio, el Padre Orlando Sanchez. ?Para Enero volvimos a solicitar reiteradas veces entrevistarnos con el Director, que para ese entonces ya hab?a cambiado, siendo el actual el Padre V?ctor S?nchez, con qui?n nunca pudimos llegar a vernos, pese a que en dos oportunidades nos hab?an fijado d?a y hora para reunirnos, pero que a ?ltimo momento, fueron canceladas por distintas razones ?, recuerda M?nica Garbuglia, referente del Colectivo.

La respuesta por parte de la instituci?n brill? por su ausencia. Frente a esto, y con previa notificaci?n, el Colectivo inici? la repintada el 23 de junio de este a?o. El apoyo fue masivo. Estudiantes, militantes y concejales de la ciudad participaron de un acto cargado de emoci?n, de fuerza, de convicci?n. El mural deb?a ser puesto en su lugar y as? lo hicieron quienes desde hace a?os impulsan la realizaci?n de recordatorios realzando la pertenencia pol?tica de los desaparecidos. Ya suman m?s de 50 los murales pintados en toda la ciudad.

?Desde el 2007 hasta diciembre del 2011, el mural con casi quinientos nombres, dentro de los cuales figuran varios ex ? alumnos y un sacerdote de esa instituci?n, fue respetado por el conjunto de la sociedad rosarina y por el mismo colegio?, aclar? el Colectivo de Ex presos.

Dos d?as despu?s de la repintada, la esquina de Espa?a y Salta amaneci? tapada de un verde oliva. ?Fue una cachetada?, expres? El Colectivo de Ex Presos en un comunicado.

No se rindieron. La primera reuni?n lograda con la instituci?n fue tensa, ?spera y dur? m?s de tres horas. Se escucharon argumentos poco consistentes como el esgrimido por el padre Sanchez quien se aferr? al concepto de ?propiedad privada?. Fue en ese momento cuando el concejal Sukerman le record? que la escuela recibe un subsidio por parte del Estado. Concejales de la ciudad de diferentes bancadas formaron parte de este encuentro, apoyando la iniciativa de repintar el mural.

Finalmente, El Colectivo logr? una segunda reuni?n y la propuesta fue, por parte de la organizaci?n, la realizaci?n de la restituci?n del mural en conjunto con alumnos y padres de la escuela que deseen participar y ?respetando a rajatabla la pertenencia pol?tica, los nombres y las fechas?. La Comisi?n de Derechos Humanos del Concejo Municipal, presidida por la concejala Fernanda Gigliani actu? como mediadora.

Esta vez, el tono del encuentro fue diferente. Por parte del Colegio San Jos? se mostraron dispuestos a la posibilidad de reconstruir el mural con sus quinientos nombres y hasta pidieron disculpas por el trato dispensado hacia los sobrevivientes que conforman el espacio del Colectivo de Ex Presos.

Las esperanzas y las expectativas son numerosas. M?nica no baja los brazos y mantiene su ilusi?n intacta, imaginando el d?a en que los pinceles, una vez m?s, hagan memoria.

Como dicen los que saben, la lucha contin?a.






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Publicado el: 31/08/2012

Por Mar?a Cruz Ciarniello.
Categor?as:
Derechos Humanos / Documento

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