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Reciclaje de computadoras (IV)
El potencial del descarte

Entre las empresas que fabrican computadoras y aquellas que las reciclan, se despliega todo un circulo virtuoso de cuidado del medioambiente, oportunidades de negocios, generaci?n de puestos de trabajo e inclusi?n digital. El reciclaje de computadoras desaf?a la trampa de consumo capitalista y puede abrir oportunidades para amplios sectores de la poblaci?n, oportunidades que exploramos en este informe.

En el informe ?High ?Toxic? Tech? (pdf) elaborado por Greenpeace en agosto de 2008, se establece que ?el boom del consumo mundial de aparatos el?ctricos y electr?nicos ha creado una explosi?n en la generaci?n de basura electr?nica, la que contiene sustancias qu?micas t?xicas persistentes en el ambiente y metales pesados. Dado que estos aparatos han sido dise?ados utilizando tales sustancias, cuando son desechados al final de su vida ?til, no pueden ser dispuestos o reciclados de un modo ambientalmente seguro?.

Para contrarrestar lo anterior, el concepto de responsabilidad extendida del productor (REP) propone que los productores del sector se hagan responsables colectivamente por los impactos ambientales de sus productos a lo largo de toda su vida ?til: producci?n, uso y disposici?n final.

La pol?tica m?s eficiente sobre el destino final de las computadoras ser?a aquella que atribuye la responsabilidad a los productores. As? concuerdan los integrantes de lixoeletronico.org, puesto que ?eso los fuerza a dise?ar productos con mayor tasa de reciclabilidad y con menos sustancias t?xicas, dejando el proceso de reciclaje m?s barato?. Sostienen que los municipios ya enfrentaron dificultades para destinar adecuadamente la basura com?n producida en la ciudad y que delegarles la responsabilidad del tratamiento de residuos electr?nicos es inviabilizar una soluci?n efectiva. Y la respuesta tampoco estar?a en el consumidor final: ?si se atribuye la responsabilidad al consumidor final, es definitivamente escoger por la continuidad de los problemas ambientales que los electr?nicos causan?, enfatizan.



Existen pa?ses que han adoptado el concepto de responsabilidad extendida del productor a trav?s de marcos regulatorios y leyes. ?Los pa?ses en v?as de desarrollo tienen grandes cantidades de residuos de aparatos el?ctricos y electr?nicos propios, con pr?cticamente nula infraestructura para hacerse cargo de ellos. Tambi?n suelen importar productos desechados por pa?ses desarrollados para reutilizarlos o repararlos, donde terminan por desecharse sin un tratamiento de reciclaje formal seguro?, se asegura en el mencionado informe de Greenpeace.

Seg?n Leila Devia, actual directora del Centro Regional para Am?rica del Sur del Convenio de Basilea (doc), el mayor problema no es la generaci?n de basura sino el ?tratamiento que se le da a la misma e intentar reducir al m?nimo esa generaci?n?. Una pol?tica que podr?a evitar la composici?n peligrosa de sustancias en los productos es la llamada clean up, que supone que los fabricantes se comprometan a suplantar los materiales t?xicos por otras sustancias menos contaminantes.

Es decir, un adecuado programa de REP contribuir?a notablemente a la reducci?n en el impacto socioambiental de los residuos peligrosos derivados de los residuos electroelectr?nicos pero tambi?n a una mejora en la calidad de la reutilizaci?n y el reciclaje a nivel local.

El concepto de responsabilidad extendida del productor se articula a su vez con el concepto de responsabilidad individual del productor (RIP), que determina que cada empresa es responsable individualmente por sus productos. La propuesta consiste en incentivar financieramente a las empresas a que inviertan en la eliminaci?n de las sustancias peligrosas de sus productos y en la utilizaci?n de materiales y dise?os que favorezcan el reciclaje y reutilizaci?n de los mismos. Esto ser?a posible en primer lugar, debido a que la distinci?n de los productos se har?a por su marca y segundo, a que el productor tendr?a alg?n tipo de control sobre el destino de los productos que fueron desechados.

Gran parte del mercado de electr?nicos est? conformado por aparatos sin marca, lo que representa un verdadero desaf?o para la REP. ?Lo que no veo es un hilo conductor entre todos los actores?, afirma Devia. ?Las empresas tienen resistencia para adherir a la responsabilidad extendida pero tambi?n se escudan en la falta de articulaci?n y asumen la responsabilidad de sus productos pero no los de terceros?, critica.


Verde que te quiero verde

R?pidamente obsoletas y dif?cilmente reciclables cuando no fueron dise?adas para ello, las computadoras necesitan pasar a ser ?productos verdes?, como resultado de planes de reciclaje responsable que incluyan ?dise?o verde?.

?Con el eco-dise?o, la industria tendr?a que reformularse?, se?ala H?ctor Gonz?lez, coordinador del Subprograma de Gesti?n Integral de Residuos S?lidos Urbanos del Instituto Nacional de Tecnologia Industrial de Argentina. Y llama la atenci?n a la situaci?n de pa?ses latinoamericanos como Argentina, donde existen otros condicionantes frente al eco-dise?o como el hecho de tener una actividad b?sicamente de ensamblaje y no de generaci?n de los equipos. Seg?n el responsable del INTI, esto determinar?a que reci?n ?cuando se instale firmemente en Europa y en Estados Unidos, quienes tienen la mayor?a de las plantas industriales en Asia, ahi va a llegar a Argentina, o sea, mucho tiempo despu?s?.

?Creo que el tema del eco-dise?o es un desaf?o muy grande a largo plazo, teniendo el respaldo legal y en esto Am?rica Latina est? muy lejos porque tiene marcos normativos muy l?biles, por lo cu?l no podemos generar una nueva industria como s? lo hace la Uni?n Europea que tiene un marco legal en el que la empresa tiene que cumplir si o si. Ac? es muy l?bil porque los intereses son muy ambiguos?, opina Gonz?lez.

?Teniendo un marco normativo importante, va a venir toda la l?nea de producci?n ecol?gica. Me parece que toda Sudam?rica, como un fuerte generador en este aspecto, tiene que resolver ese gran pasivo ambiental que tiene con los residuos electr?nicos, ante la gran cuota de exclusi?n digital que tiene y que no tiene la Uni?n Europea?, agrega el coordinador del INTI.

Desde agosto de 2006, Greenpece Internacional publica cuatro veces al a?o su ?Gu?a de Electr?nicos Verdes? (http://www.greenpeace.org/international/campaigns/toxics/electronics/how-the-companies-line-up), donde expone a las empresas fabricantes de computadoras, tel?fonos celulares, televisores y consolas de videogames, en un ranking que las califica de mejor a peor en cuanto a sus pol?ticas de quimicos t?xicos, reciclaje y cambio clim?tico.

En el ranking de marzo de este a?o, los fabricantes de computadoras y perif?ricos perdieron su oportunidad de lucirse: en una escala de 1 a 10 puntos, siendo 10 el objetivo, Hewlett Packard recibi? 2.7 puntos al igual que Microsoft, mientras que Apple subi? 4 lugares llegando a 4.7 puntos debido a sus avances en el tema del reciclaje.

Este ranking expresa puntajes otorgados por la organizaci?n social a las empresas en funci?n de 3 demandas: que limpien los productos para reducir las sustancias contaminantes, que recuperen y reciclen sus productos una vez que se volvieron obsoletos y que reduzcan los impactos clim?ticos de sus operaciones y productos.

Siguiendo en la l?nea de las responsabilidades, Devia marca la responsabilidad del consumidor de productos electr?nicos, quien tambi?n es parte de esta cadena de actores. ?Tu responsabilidad como generador individual es hacer una selecci?n diferenciada, no mezclar esto con basura org?nica y saber cu?les son los lugares para reciclar o el tratamiento para disposici?n final. Y esa gesti?n est? haciendo falta?, resalta.

Con su casa matriz en Brasil, el Comit? para la Democratizaci?n de la Inform?tica (CDI) integra una red presente en nueve pa?ses, contando con 753 Escuelas de Inform?tica y Ciudadania y m?s de un mill?n de capacitaciones desarrolladas en 13 a?os de trayectoria. Esta entidad propone 10 acciones a seguir antes de cambiar de equipo, que promueven pr?cticas de consumo responsable de la mano de socializar informaci?n actualizada sobre el tema.

?Lo ideal ser?a comprar un equipo y, en el momento de descartar, saber inmediatamente qu? hacer y a quien buscar. Son informaciones que deberian estar claras, publicadas y divulgadas y eso no sucede porque muy pocas empresas lo hacen?, se?ala Rodrigo Baggio, director ejecutivo de dicha organizaci?n.


Reciclar es un negocio

Una computadora personal tiene un promedio de vida ?til de 5 a?os para los usuarios dom?sticos y de 4 a?os para las empresas. De sus componentes, 25% son recuperables, 72% son reciclables y 3% son residuos contaminantes. Sin embargo, s?lo 10% de los componentes de las computadoras son reciclajes de alguna forma. ?Por qu? una cifra tan baja de reciclaje?

Cuando hablamos de sistemas de gesti?n de residuos electr?nicos, espec?ficamente de computadoras, hablamos de un sistema de gesti?n de residuos caros, t?xicos y al mismo tiempo preciosos cuyo valor en cuanto producto reciclado (con materia-prima a?n valiosa como oro, plata, cobre o plomo) siempre ser? menor que el valor del producto original, con alto valor por la tecnolog?a y el conocimiento agregados. El manejo adecuado de esos residuos exige un reciclaje efectivo, servicio que generalmente se contrata de empresas de reciclaje de metales.

SARCO Reciclagem Digital es la fundaci?n de la empresa SARCO, ubicada al sur de Brasil, que trabaja con el reciclaje y manejo seguro de basura digital. Act?a directamente en la recolecci?n de los residuos en los m?s variados lugares (oficinas p?blicas y privadas, casas) de los diferentes municipios brasileros, ayudando a las personas a darle un destino correcto a su basura digital.

La fundaci?n SARCO Reciclagem Digital inici? sus actividades en 2008 y se dedica al reciclaje de componentes electroelectr?nicos, entre ellos computadoras, y recogen los equipos sin costo alguno, por el momento solo en el municipio de S?o Leopoldo en Rio Grande do Sul.

La empresa Umicore es un grupo internacional que trabaja en cuatro ?reas de negocios: materiales avanzados, productos de metales preciosos y catalizadores, servicios de metales preciosos y especialidades de zinc. Adem?s de incentivar el dise?o, reutilizaci?n, reciclaje y descarte responsable de sus productos, lleva adelante su propia campa?a de reciclaje de baterias recargables.

Botrade es una empresa especializada en el tratamiento mec?nico de chatarra electr?nica conteniendo cobre, aluminio, metales preciosos y pl?stico. Fundada en 1988 en Espa?a tiene sucursales en Argentina, Chile y Brasil.

La empresa fabricante de computadoras Dell, por su parte, lanz? un programa de recolecci?n de equipos y dos centros de reciclaje, uno en S?o Paulo y otro en Porto Alegre. Los consumidores entran en contacto con la empresa a trav?s de su sitio web y sin ning?n costo recogen la computadora en su domicilio. Una vez recibidos los equipos, estos son evaluados y reacondicionados para luego ser donados a organizaciones no gubernamentales que lleven adelante programas de inclusi?n digital.

Una tarea similar de recolecci?n desarrolla IBM: recoge las computadoras, las desmonta y las devuelve al mercado como materias primas.

En el estudio ?La responsabilidad extendida del productor en el contexto latinoamericano? de 2008 elaborado por Thomas Lindhqvist, Panate Manomaivibool y Naoko Tojo, se afirma que los sistemas de reciclaje de un programa de responsabilidad extendida del productor (REP) pueden ser un negocio lucrativo: ?el negocio promete oportunidades laborales tanto para mano de obra calificada como no calificada y puede atraer capitales nacionales e internacionales para la instalaci?n de establecimientos de reciclaje?.

Adem?s, dichos sistemas de reciclaje basados en programas de REP reducir?an las exigencias para los municipios, que son quienes tienen la responsabilidad de manipular las computadoras en calidad de residuos s?lidos municipales.

En este sentido, en Argentina el Subprograma de Gesti?n Integral de Residuos S?lidos Urbanos del Instituto Nacional de Tecnologia Industrial ofrece una experiencia en t?rminos de la articulaci?n de una instancia p?blica nacional con otras municipales. ?Como organismo nacional, interactuamos con los gobiernos provinciales y muchas veces directamente con los municipios que son los que tienen la obligaci?n en el tema. Por m?s que haya del otro lado una cooperativa de trabajo o una organizaci?n no gubernamental, siempre trabajamos con los municipios, que en general adhieren porque tambi?n los ayuda a bajar costos? explica H?ctor Gonz?lez, responsable del subprograma.

Adem?s, el reciclaje de computadoras puede encararse como un emprendimiento. Para interiorizarse acerca de los pasos b?sicos para comenzar esta iniciativa, se recomienda leer la ?Gu?a pr?ctica para el reciclaje de computadoras y otros equipos tecnol?gicos? (pdf), una publicaci?n de UNESCO por el momento disponible en ingl?s.

?La gesti?n de residuos electr?nicos es cosa muy seria pero todav?a no es llevada a serio?, opina Rodrigo Baggio de CDI. Y retomamos la pregunta inicial: ??Por qu? una cifra tan baja de reciclaje??

En Am?rica Latina, el reciclaje de residuos electr?nicos a?n no es sustentable y los programas de incentivo econ?mico al reciclaje de computadoras brillan por su ausencia. ?La sustentabilidad efectiva depender? de c?mo se dise?en las pol?ticas p?blicas?, sostienen los miembros de lixoeletronico.org.

Sin embargo, puede afirmarse que los planes no faltan, tanto en t?rminos de leyes como de iniciativas. ?Lo ideal ser?a intensificar el intercambio de informaciones, envolviendo m?s personas y pa?ses en esos avances?, destaca Baggio de CDI.

Por otro lado, el discurso ambientalista en torno de las computadoras obsoletas deber?a esforzarse por evidenciar las posibilidades de negocio existentes en el reciclaje y reacondicionamiento de residuos inform?ticos. Tratar el tema parcialmente puede ocultar los beneficios econ?micos derivados del buen tratamiento de los residuos y as? hacer a un lado estas alternativas.


Reciclar da trabajo

Los recicladores y las cooperativas son actores clave en el circuito del reciclaje y el reacondicionamiento de computadoras. Estamos hablando de los eslabones m?s d?biles de la cadena, puesto que no son pocas las dificultades que encuentran a la hora de vender en forma directa los productos reciclados a las grandes empresas en virtud de los actores intermediarios que compran ese material y lo revenden en toneladas.

En el caso de los recicladores, se trata de personas exclu?das del mercado formal de trabajo que utilizan como una forma de subsistencia la recolecci?n de materiales tales como cart?n, pl?stico, vidrio, latas y posterior venta a empresas de reciclaje.

Una m?nima parte de los millones de toneladas de basura electr?nica producida es recepcionada por algunas pocas cooperativas de recicladores que separan los materiales para luego venderlos en los diferentes mercados. Si bien es frecuente que quienes llevan materiales a las cooperativas sean las empresas recolectoras de basura municipales, en general los protagonistas son los cartoneros, quienes generan estos espacios para ofrecer un marco laboral de mayor seguridad y representatividad al sector, adem?s de proyectos de inclusi?n social para ellos y sus familias.

Pero esta moneda, como todas, tiene dos caras: ?las cooperativas se transforman en un resumidero de lo que es rezago electr?nico con un alto nivel de toxicidad?, manifiesta H?ctor Gonz?lez del INTI.

La Cooperativa Toma del Sur en Buenos Aires, Argentina, es un caso ejemplar de esfuerzo en un pa?s donde se producen cerca de 100 mil toneladas anuales de basura electr?nica. Dock Sud, el lugar donde se encuentra la cooperativa, es reconocido como un barrio populoso donde no muchos se animan a ingresar. All? mismo, en una de esas calles por donde transitan carros tirados por hombres y pibes que llevan infinidad de cartones, botellas y pl?sticos se levanta una cooperativa de reciclaje. El port?n esconde un inmenso galp?n repleto de desechos de todo tipo, en su mayor?a, restos de computadoras y monitores.

A pesar del caos que es posible reconocer apenas se ingresa, hay un orden que refleja un ritmo de trabajo permanente. Si bien es cierto que no existe una l?nea de producci?n definida, hay sectores informales dentro del galp?n delimitados por el tipo de material que se desguaza.

Comenzaron en 2003 reciclando cart?n, papel, pl?stico y material ferroso con ayuda del Instituto Movilizador de Fondos Cooperativos. ?El Instituto nos prest? dinero, compramos un cami?n, una compactadora, sin recibir nunca ning?n subsidio del gobierno, jam?s?, recuerda Jos? Barrera, presidente de la Toma del Sur.

La Toma del Sur es una de las pocas cooperativas en Argentina que, adem?s del reciclaje de cartones y pl?sticos, recibe material electr?nico para su posterior desguace. Actualmente, esta es la principal actividad de la cooperativa debido a que es la m?s rentable.

?Al principio, sin conocer nada, nos trajeron 200 monitores. Cuando los abrimos encontramos cobre y empezamos a romperlos a palazos. La gente del Instituto Nacional de Tecnolog?a Industrial nos empez? a explicar c?mo desarmar y los elementos necesarios para trabajar?, destaca Barrera. ?Tambi?n estamos trabajando con otras cooperativas, para ense?arles como desguazar de la mejor forma para evitar la contaminaci?n. La idea es que esto se multiplique para que, primero, las familias tengan trabajo y, segundo, para tratar de que esto no vaya a parar a un r?o o a la tierra. Si sab?s que existe una cooperativa que recicla podes llevar el material para que lo trabajen?.

?Hasta noviembre de 2008 el reciclaje de material electr?nico ha rendido much?simo, nos ha dado un buen poder econ?mico para poder solventar los gastos pero lo que m?s nos cuesta son los fletes? explica Barrera, puesto que tienen prohibido trasladar monitores, de lo contrario reciben una multa.
La reparaci?n de computadoras es otro de los proyectos. Varios adolescentes se encuentran aprendiendo a reparar computadoras con el fin de que en un futuro pr?ximo puedan trabajar en la cooperativa.
El proyecto de La Toma del Sur es tambi?n un proyecto de inclusi?n social. Adem?s del galp?n donde se reciclan diferentes materiales, funciona un comedor para m?s de 200 ni?os y ni?as y all? mismo se dan talleres de inform?tica con algunas m?quinas reacondicionadas.

Urgencias y desaf?os

Consultados sobre si creen que el reciclaje de computadoras comienza a ser visto como un tema que demanda atenci?n urgente, los integrantes de lixoeletronico.org sostienen que no solo demanda atenci?n urgente debido a la gran toxicidad que poseen esos materiales sino tambi?n a que es cada vez mayor la producci?n de electr?nicos que ser?n descartados en pocos a?os. A esto se suma que ya existe un retraso en la creaci?n de estructuras, pol?ticas y alternativas efectivas para lidiar con ese problema que avanza a pasos agigantados.

Para Rodrigo Baggio, director ejecutivo de CDI, ?el nivel de concientizaci?n aument?, pero todav?a estamos gateando. Precisamos de material did?ctico al respecto, de involucrar a las escuelas en esa discusi?n, de hacer foros especializados y, sobre todo, de tomar medidas dr?sticas y urgentes?.

Ante esa urgencia, ?cu?les son los principales desaf?os que presenta el reciclaje de computadoras en Am?rica Latina? A esa pregunta que recorre toda la investigaci?n respondieron con interesantes propuestas los integrantes de lixoeletronico.org: primero, definici?n de responsabilidades sobre el residuo; segundo, construcci?n del tema en tanto problema ambiental; tercero, estructuraci?n de redes de reapropiaci?n tecnol?gica; cuarto, incentivo a las empresas de reciclaje; finalmente, presi?n social y pol?tica para la fabricaci?n de electr?nicos m?s f?ciles de ser reciclados y con menos sustancias t?xicas.

Parece ser que la problem?tica ambiental de los residuos inform?ticos es un problema pero no tanto como otros para la mayor?a de la poblaci?n. ?El hecho de que la problem?tica ambiental de los electr?nicos sea desconocida por gran parte de la sociedad, al contrario de cuestiones como calentamiento global, desforestamiento y contaminaci?n de las aguas, es algo a ser divulgado eficientemente?, destacan los miembros del equipo de lixoeletronico.org. ?La sustentabilidad efectiva depender? de c?mo se dise?en las pol?ticas p?blicas. Actualmente la mayor parte de los residuos electr?nicos son desperdiciados, la responsabilidad de qui?n debe cuidar de su reciclaje todav?a no fue definida y el tema no es tenido como un gran problema ambiental por el gran p?blico?, agregan. En lo que se refiere a las pol?ticas propiamente dichas, ?hay lagunas tanto en el destino de los residuos s?lidos como en la atribuci?n de las responsabilidades por el residuo generado?.

Para Baggio, uno de los principales desaf?os nace a partir de que no existe sinergia entre todos los sectores involucrados en el reciclaje de computadoras, sobre todo en determinados escenarios de Am?rica Latina m?s atrasados pol?ticamente y con niveles bajos de educaci?n. ?Sac?s el problema de tu territorio pero permanece en otro lugar y acaba golpe?ndote otra vez, de nada sirve barrer el problema debajo de la alfombra?, apunta el director ejecutivo de CDI.

Otra tarea futura en relaci?n al reciclaje de computadoras pasa por promover intercambios a nivel regional para lograr una homologaci?n normativa y t?cnica.

Como ya mencionamos con anterioridad, otro de los desaf?os radica en el descarte final de aquello que ya no tiene c?mo ser reaprovechado.

Es sabido que en Am?rica Latina falta infraestructura para manejar residuos electr?nicos. Los incentivos a las cooperativas de reciclaje y recuperadores urbanos, la estandarizaci?n de los procedimientos en las empresas de desmontaje manual o mec?nica y la ubicaci?n estrat?gica - con adecuada distribuci?n geogr?fica ? del mercado de reciclaje, contribuir?an enormemente al desarrollo de una infraestructura regional coherente con las necesidades.

?Deber?amos reciclar, pero no deber?amos empezar por ah?. Primero redise?ar, luego reducir, reusar y por ?ltimo, cuando se agoten las alternativas, reciclar?. Esta frase de Bill McDonough citada tambi?n en la apertura de la serie de cuatro art?culos sobre reciclaje de computadoras resulta sumamente acertada porque revela que, para llegar a la alternativa del reciclaje, hay muchos otros niveles de conciencia y responsabilidad que deben alcanzarse. De parte de los usuarios y usuarias, de parte de los Estados, de parte de las empresas, de parte de las organizaciones sociales, de parte de todas las personas que est?n leyendo estas palabras frente a una computadora. ?Cu?l es tu parte?

Por Flavia Fascendini con colaboraci?n de Mar?a Cruz Ciarniello.
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?El proyecto que dio origen a este trabajo fue el ganador de las Becas AVINA de Investigaci?n Period?stica. Los conceptos, opiniones y otros aspectos del contenido de la investigaci?n son responsabilidad exclusiva del autor y/o medio?.





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Publicado el: 09/10/2009


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