Elecciones en Santa Fe
Los temas ausentes
La vida colectiva de los santafesinos podr? cambiar o no a partir de las elecciones del domingo 2 de setiembre. Mientras que el partido gobernante de hace casi un cuarto de siglo se ufana de 7 mil millones de d?lares en exportaciones que salen de la provincia, el principal frente opositor mantiene un discurso moderado que suprime las denuncias contra una pol?tica de estado que permiti? la multiplicaci?n de las urgencias sociales, por un lado, y por otro, establece una duda que se expresa en el voto en blanco porque no termina de confirmar que se trata de una modificaci?n en serio de las condiciones existenciales de los habitantes del segundo estado argentino.
La realidad de los pibes santafesinos, la hipocres?a en torno al supuesto combate al narcotr?fico, la concentraci?n de riquezas en pocas manos, la deserci?n escolar, la propiedad de los grandes medios de comunicaci?n, los saqueos a los patrimonios colectivos que son los clubes de f?tbol de las m?s pobladas ciudades de Santa Fe y el estado de la justicia provincial son temas que deber?an discutirse de cara a la gente y que, por diversos motivos, no aparecen en las agendas de los principales dirigentes.
Aquellos que aspiren a producir un cambio que favorezca a las mayor?as santafesinas deber?n, por lo menos, comenzar a hacer presentes estos temas que, por ahora, siguen ausentes e invictos en beneficio de los pocos.
La parte del le?n
En la provincia cuyo gobernador se ufana de exportar 7 mil millones de d?lares por a?o, la realidad cotidiana se empecina en marcar la derrota del sue?o de Belgrano.
Cuando Don Manuel iz? la bandera en las barrancas del Paran?, en el viejo Pago de los Arroyos, el general rebelde ten?a otras banderas m?s profundas y claras.
La pol?tica deb?a servir para hacer feliz al pueblo, escrib?a por entonces; al mismo tiempo que sosten?a que la verdadera felicidad resid?a en la ?repartici?n de las riquezas?.
Que para ello hab?a que enfrentar a las minor?as, al contrabando y a la corrupci?n instaladas en el estado.
Esas eran las banderas del revolucionario de 1810. Banderas que se sintetizaban en aquel pa?o celeste y blanco creado para enamorar y contagiar de ideales a los ?indiferentes? al proceso transformador iniciado en Buenos Aires que miraban a los porte?os como enemigos, tal como se lee en sus cartas.
La bandera es apenas una de las mejores banderas de Don Manuel: protagonismo pol?tico, compromiso con la revoluci?n y garantizar un estado que produzca la ?repartici?n de las riquezas?.
Casi doscientos a?os despu?s, en el territorio que izara la bandera -a?n contrariando la voluntad del triunvirato que lleg? a sancionarlo por ello-, la realidad santafesina marca el anverso de aquella pasi?n de Belgrano.
Seg?n el Instituto Nacional de Estad?sticas y Censos, a trav?s de los ?ltimos informes disponibles que datan del primer semestre de 2006, en la ciudad capital del segundo estado argentino, en los alrededores de la Casa Gris, 14 mil familias acomodadas (un poco m?s del once por ciento de la poblaci?n) se quedan con el 30 por ciento de los ingresos totales. Mientras que el 20 por ciento m?s empobrecido apenas ara?a el 4,7 por ciento de la torta.
Una fenomenal brecha social que demuestra la continuidad de la matriz econ?mica y social de los a?os noventa.
Y en el Gran Rosario, mientras tanto, 37 mil familias (algo m?s del 12 por ciento de la poblaci?n) acaparan el 30 por ciento de los ingresos. Ese segmento, el del privilegio, tiene en total, al ampliarse al veinte por ciento de la poblaci?n de mayor riqueza, el 46 por ciento del dinero producido por la totalidad de los rosarinos.
Mientras que el 16 por ciento m?s castigado del aglomerado, apenas ara?a el 5 por ciento de los ingresos.
Puede haber m?s dinero en la provincia, pero siempre se queda en las mismas manos.
Una brutal confirmaci?n de la continuidad de los a?os noventa.
Belgrano sigue siendo derrotado en Santa Fe.
(Fuentes: Tribuna Econ?mica Pol?tica, boletines 73 y 74, del 3 y 10 de mayo de 2007).
?La revoluci?n educativa?
Una escuela de la periferia rosarina que tiene comedor y copa de leche para sus novecientos alumnos, recibe 598,99 pesos mensuales en concepto de gastos de funcionamiento. Dinero que, a pesar de estar reservado cada treinta d?as, llega atrasado.
Todas las escuelas, con o sin comedor, reciben 35 centavos por copa de leche por chico, costo que hay que confrontar con el precio del litro afectado hace rato por la lenta y progresiva escalada inflacionaria. Esa es la raz?n, dicen las maestras, que explica por qu? muchas veces aparece el mate cocido en lugar de la copa de leche.
El presupuesto para la raci?n de comida que se reparte en los comedores es de solamente un peso.
A estas sumas de oprobio, hay que agregarles otros fondos que suelen venir a las escuelas santafesinas si est?n dentro del denominado Programa para la Integraci?n Igualitaria Educativa, que procede del Ministerio de Educaci?n de la Naci?n.
Con criterios misteriosos, llegan a las escuelas que est?n dentro del PIIE dos cuotas de 2.500 pesos cada una y computadoras sin que haya maestras o maestros dedicados a ense?ar los rudimentos m?nimos en computaci?n ni tampoco se crean cargos para ellos.
Otra de las partidas es la que deriva del llamado Plan Nutricional, tambi?n nacional, que prev? 8 pesos por raci?n de comedor por cada chico por mes.
Es decir que alguien supone desde la cartera educativa del pa?s que una nena y que un nene puede nutrirse bien con 8 pesos cada treinta d?as, a raz?n de 26 centavos por d?a para alimentar a un pibe...
Estos son los n?meros cotidianos que marcan la sobrevivencia de la escuela p?blica en la provincia de Santa Fe.
Todo dentro de la llamada ?revoluci?n educativa? de la que habl? el gobernador Jorge Obeid en sus mensajes a la Legislatura.
En forma paralela, la ministra Adriana Cantero, la misma que colabor? en la redacci?n de la Ley Federal de Educaci?n ahora defenestrada por el kirchnerismo, sostiene que es necesario volver al viejo esquema de primaria y secundaria.
?Cu?ndo cambi? de criterio la ministra?, ?cu?l es el verdadero pensamiento de la funcionaria, entonces menemista y hoy kirchnerista y siempre funcionaria del obeidismo?.
A este cuadro concreto de lo que sucede en las escuelas santafesinas todos los d?as, habr? que sumarle el estado edilicio de las mismas, siempre al borde de una tragedia con m?stiles que se caen sobre la cabeza de los alumnos, paredes electrificadas y pisos que se hunden, como hace a?os viene informando la Asociaci?n del Magisterio de Santa Fe.
Por otra parte, el ex ministro de Educaci?n, Daniel Germano, sostuvo que a fines de los a?os noventa, la deserci?n escolar hab?a subido al 35 por ciento, el doble de lo registrado a fines de los a?os ochenta.
?D?nde est?n esos pibes?.
?Qu? significar? la palabra futuro para ellos?.
(Fuente: entrevistas a maestras de la ciudad de Rosario, AMSAFE y diarios de la ?poca).
Justicia y ficci?n
?Este es otro mundo?, dijo un alto funcionario del poder judicial santafesino para describir la imposibilidad de pensar la realidad desde lo que sucede fuera del ?palacio? de tribunales. Ese otro mundo tiene una historia pol?tica que determina el presente: el servicio p?blico de justicia en Santa Fe es una red invertida de pescadores, pasan de largo los peces gordos, quedan atrapados los peces chicos.
Pero para entender la cuesti?n habr? que entender la historia poll?tica de su conformaci?n.
Una cr?nica que hunde sus ra?ces en los primeros tiempos de la democracia recuperada en diciembre de 1983.
Postales que explican el por qu? no hay castigo para los inundadores, los saqueadores del Banco Provincial, los asesinos de diciembre de 2001 y las decenas de causas en donde los delincuentes de guante blanco se pasean con absoluta conciencia de su impunidad.
Angel Dambrosio era el secretario de gobierno de Rosario una vez recuperada la democracia. Un d?a fue llamado por el Gordo Flarte, a cargo del Ministerio de Trabajo en la ciudad. Ten?a que arreglar el tema de la justicia provincial.
-Era una reuni?n de la justicia provincial se hac?a en el estudio Cerrutti. Con ?l ten?a una buena relaci?n porque hab?a sido abogado de unas cooperativas de seguros que ten?an seguros contratados y como ?l era abogado de todos los choferes de empresas de transporte, ten?amos muchos juicios laborales. Ya en aquel entonces ten?a un juzgado donde escrib?a desde el primer decreto hasta la sentencia. Pero ten?amos una buena relaci?n porque el ?Gringo? en el sentido cotidiano era un tipo que no te jod?a...Cuando voy a la reuni?n, estaba el ?Gringo?, nos saludamos. Hab?a toda una serie de personajes, la mayor?a de ellos desconocidos para m?, en un momento dado, Cerrutti se levanta y deja el lugar principal de su escritorio para que se siente alguien, era el due?o del sindicato que lo hab?a puesto a Vernet, era Miguel G?mez, se sent? ah?. Estaba el gordo Flartes, Reynaldo, yo y dice: ?Bueno, como se dieron los resultados en la provincia nosotros tenemos que armar una justicia de acuerdo a los votos?, fue la primera y la ?ltima reuni?n que fui, no fui m?s, pero se que los jueces fueron designados as?....Me parece que el tema de la justicia en la provincia de Santa Fe, es pavoroso, empieza en el ?68, transcurre en esta an?cdota que te cuento de Miguel G?mez y concluye en Usandizaga y Reuteman diciendo que hay que designar jueces amigos...
El relato del primer secretario de gobierno de Rosario en democracia es una s?ntesis de lo que sucedi? en las otras provincias del litoral.
Por eso la cr?nica pol?tica del sistema judicial santafesino puede servir para entender por qu? hubo tanta impunidad construida en democracia.
Dicen que lo primero que se privatiz? en Santa Fe fue la justicia.
El ingeniero Eduardo Cevallo fue un adelantado en ese sentido, sostiene un ex juez provincial.
Hacia mediados de 1984, fueron removidos m?s de una decena de jueces.
El periodismo hablaba de un nuevo bot?n de guerra.
Dos estudios jur?dicos impulsaron sus candidatos. Detr?s de ellos estaban los principales resortes del poder de los partidos mayoritarios, del peronismo y del radicalismo.
Los juzgados de instrucci?n y los laborales para el peronismo, y los civiles y comerciales para el radicalismo.
Pero tambi?n hubo acuerdo con los estudios vinculados a los sectores militares y a las fuerzas de seguridad, como los relacionados con la curia rosarina.
La justicia santafesina demostraba, una vez m?s, su fuerte cord?n umbilical con los sectores que propiciaron y medraron durante la dictadura.
En octubre de aquel a?o, los tribunales rosarinos fueron saqueados. Se llevaron documentaci?n que no solamente revelaba la identidad de los colaboradores civiles de la dictadura, sino tambi?n los papeles de medianas y grandes empresas beneficiadas por el terrorismo de estado. Uno de los abogados que particip? en el simulacro de la investigaci?n fue uno de los sempiternos representantes del arzobispado local.
Hacia 1990, un decreto del gobierno de V?ctor Reviglio cre? el Consejo de la Magistratura con la intenci?n de hacer m?s transparente el mecanismo de selecci?n y designaci?n de jueces. La nueva administraci?n, la conducida por Carlos Reutemann, quien hab?a prometido m?s educaci?n y m?s justicia, acordaba la nominaci?n de los integrantes del Tribunal de Cuentas con la oposici?n y los anteriores gobernantes.
La arqueolog?a pol?tica de la justicia santafesina permite suponer que, si los fallos reflejan el sentido com?n de la sociedad --como sostienen reconocidos jueces--, la historia y el funcionamiento del poder judicial entra?an la continuidad del sentido com?n que dio origen a la dictadura y a la concentraci?n econ?mica en pocas manos.
(Fuentes: ?Impunidades y esperanzas?, 1997; ?El litoral, 30 a?os despu?s. Sangre, dinero y dignidad?, 2006; libros del autor de esta nota).
?Los prost?bulos de la soja?
Susana Chiarotti, integrante del Comit? de Am?rica Latina para la Defensa de los Derechos de la Mujer, sostuvo que "hoy los prost?bulos en la "rep?blica de la soja" (por la zona del Gran Rosario) se abren solo si hay comisarios de socios". Fue en el marco de las jornadas sobre Trata de Personas, organizadas por ?Mujeres Creando Futuro? y que se desarrollaron en los salones de la Sociedad Hel?nica de Rosario, el s?bado 7 de julio pasado.
La investigadora se?al? que la complicidad con la explotaci?n de chicas menores de edad tambi?n se encuentra en los grandes medios de comunicaci?n de la zona. "Los grandes diarios que piden un n?mero de documento para publicar una carta de lectores, ?qu? le piden al hombre que publica ocho anuncios de oferta de sexo?. ?C?mo lo identifican?. Parece imposible ir contra los medios porque se protegen con la libertad de prensa. Ya no es m?s libertad de prensa. Es libertad de comercio?, apunt?.
Chiarotti agreg? que ?hay mucho dinero en juego en todo esto, para los medios, para la polic?a y el que paga todo eso es el cuerpo explotado de las mujeres".
A la hora de se?alar ejemplos de lo que sucede en Santa Fe, Chiarotti cont? el caso de un chacarero de la zona sur que para festejarle el cumplea?os n?mero quince a su hijo var?n ?contrat? a una estudiante secundaria para que su hijo y sus amigos mantengan relaciones sexuales...?C?mo cambio la cabeza de ese chico?. ?Qu? concepci?n de la mujer doy si desde chiquito pago para usar el cuerpo de otra persona. Yo ten?a a esperanza de que despu?s de la revoluci?n del 68, desaparecer?a la prostituci?n porque habr?a mayor libertad para los j?venes. Sin embargo vuelve, no de la mano del prejuicio sexual, sino de la mano del consumo?, remarc? la militante con lucidez y claridad.
Tambi?n hizo hincapi? en la necesidad de debatir el texto de la ley sobre trata de personas que est? en el congreso de la Naci?n.
?Si la ley se acepta como est? con la cl?usula del consentimiento, va a pasar lo que sucedi? con el caso de Romina Gamarra y Cristina Ojeda, de la ciudad de Santa Fe. Terminaron ambas reconociendo que hab?an consentido en trabajar. Luego se supo que el abogado que las defendi?, un profesional que ellas nunca hubieran podido pagar, hab?a sido contratado por el proxeneta. Se cerr? el caso porque las chicas consintieron. El consentimiento no ha de ser tenido en cuenta en la ley porque si eso se mantiene ese se?or proxeneta que trafica con esto pasa ser un industrial de sexo y esa chica una trabajadora por su cuenta", denunci? Chiarotti.
Finaliz? diciendo que respeta la concepci?n de las ?compa?eras de la Asociaci?n de Mujeres Meretrices de la Argentina que definen su actividad como un trabajo digno y legalizado?, pero se?al? que no se puede ?defender que la prostituci?n es un trabajo porque el se?or que las contrata termina siendo un empresario y es la pero consecuencia de la concepci?n filos?fica y pol?tica que entiende la prostituci?n como trabajo?.
(Fuente: Bolet?n Enredando, 13 de julio de 2007)
Pibes y narcotr?fico
Hipocres?a santafesina...
En los a?os noventa, el decomiso de sustancias psicoactivas como la coca?na y la marihuana aumentaron por diez en la provincia de Santa Fe.
Un verdadero boom econ?mico. No hubo nada que se decuplicara en el segundo estado argentino.
En forma paralela, los grandes inversores y sus principales vendedores nunca pisaron los tribunales federales santafesinos ni mucho menos las seccionales policiales.
Los delincuentes de guante blanco gozan de impunidad.
A pesar de eso, una jueza federal, la doctora Laura In?s Cosidoy viene denunciando desde el a?o 2000 que parte del poder pol?tico y la polic?a provincial, La Santafesina SA participan del negocio del narcotr?fico.
Hubo reuniones, promesas de grandes cambios y lo ?nico real es que, por estos d?as, se reavivaron las amenazas de muerte contra la magistrada.
Y ella dice que esas promesas de ep?logo vienen de la propia estructura policial.
Sin embargo, no hay grandes detenidos.
Existen desplazamientos, sumarios internos y nada m?s.
La jueza amenazada, sus amigos amenazados y un ex jefe de la divisi?n Drogas Peligrosas de la provincia, muerto en un extra?o, muy extra?o accidente automovil?stico.
Como coro de fondo, las voces del gobierno provincial que prometen justicia y castigo para los grandes narcotraficantes.
Mentiras. La impunidad campea entre los que invierten y distribuyen la droga en el segundo estado argentino.
Pero a la hora de proceder, en un exceso obsceno de obviedad, los castigados son los consumidores consumidos.
Los pibes de la ciudad capital, los que apenas pueden ingerir los efluvios de una bolsita de poxiram para aguantar los golpes, correr m?s r?pido y bancarse el fr?o polar de estos d?as.
A metros, nada m?s que a metros de la Casa Gris, la sede del gobierno santafesino, fueron atrapados los integrantes de la llamada ?bandita del poxi?.
Un fenomenal procedimiento llevado a cabo por los integrantes de la Unidad Regional I, con asiento en Santa Fe capital.
La informaci?n dice que la patrulla urbana ?captur? a m?s de una decena de chicos de la calle que -seg?n denuncia de un vecino- hab?an robado en los aleda?os de la terminal de ?mnibus un tel?fono celular y otras pertenencias a una joven vecina de Colastin?. La denuncia telef?nica que realiz? un familiar de la v?ctima a la seccional primera hizo posible que la patrulla localizara en plaza Espa?a a los menores que forman en la "banda del poxi". El procedimiento -con algunas corridas alrededor del paseo- concluy? con la detenci?n de una decena de chicos cuyas edades van de los siete a los quince a?os y el rescate de los efectos robados, los que fueron encontrados en manos de una adolescente. Fuentes policiales dijeron que la mayor?a de los menores fue encontrada en su escondite habitual, es decir, entre las ramas de los ?rboles del paseo, donde acostumbran ocultarse?, sostiene la noticia.
Tan feroces como los primeros seres humanos que pisaron el planeta, el escondite eran los ?rboles...y all? los encontraron los valientes integrantes de La Santafesina SA...
La permanente prueba de la hipocres?a santafesina.
(Fuente: EL LITORAL, Santa Fe, jueves, 12 de julio de 2007).
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Publicado el: 16/07/2007
Fuente: Postales del sur
Por Carlos Del Frade.
Categor?as:
Derechos Humanos / Noticia
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