Comisi?n Organizadora del ENM
"Nosotras" somos todas
En esta nota buceamos por el tejido ?invisible? de relaciones y acuerdos que hace posible la realizaci?n de los Encuentros Nacionales de Mujeres. A trav?s del relato de mujeres militantes de diferentes organizaciones conocemos por dentro la Comisi?n Organizadora y vemos c?mo se expresa el sentido horizontal y participativo caracter?stico de esta experiencia colectiva ?nica en Am?rica Latina. Se suman a esta ronda de voces, Noem? Chiarotti, Gabriela Sosa, Laura Delmonte y Graciela Nu?o.
A?o tras a?o el Encuentro Nacional de Mujeres (ENM), un espacio multitudinario de intercambio de experiencias y construcci?n pol?tica horizontal, parido y sostenido por miles de mujeres de todo el pa?s, se potencia y pone a la vista su cualidad constitutiva: la abundancia de la diversidad.
Desde hace 24 a?os, de manera ininterrumpida miles de mujeres se re?nen para compartir y multiplicar sus luchas. Muchas de ellas viajan durante d?as para participar, para sumar su realidad dentro del amplio Movimiento.
Amas de casa, docentes, tejedoras. estudiantes, recolectoras de algod?n, de cebolla, hacheras, tabacaleras, enfermeras... todas tienen lugar. El ENM representa un inmenso mapa de la diversidad social, pol?tica y cultural de la realidad de las mujeres argentinas, un mapa vivo e itinerante, imposible de percibir a trav?s de los grandes medios de comunicaci?n, que a?o tras a?o se despliega en toda su dimensi?n y profundidad.
Desde 1985 cada encuentro nace desde las bases, desde el pie y se constituye con la participaci?n de amplios sectores y organizaciones. ?stos se van armando a partir del impulso de mujeres que de manera autoconvocada y autogestionada eligen integrar la Comisi?n Organizadora, cuya estructura es completamente horizontal y participativa.
En esta nota, las compa?eras Noem? Chiarotti, Gabriela Sosa, Laura Delmonte y Graciela Nu?o nos ayudan a pensar c?mo se expresa el sentido horizontal, plural y democr?tico propio del ENM en su instancia organizativa, todas ellas formaron parte de la Comisi?n Organizadora del segundo encuentro que se realiz? en Rosario, en el a?o 2003.
?En esa Comisi?n Organizadora ?ramos cien mujeres, algunas pertenec?amos a organizaciones pero otras no, esa heterogeneidad hizo que ese encuentro fuera algo muy grande y que pudi?ramos instalarlo en la ciudad. ?ramos un gran frente. Discut?amos much?simo, por momentos parec?a que no ?bamos a poder continuar, pero con paciencia y sin ocultar las diferencias fuimos haciendo la luz?, recuerda Laura Delmonte, referente de la Asociaci?n Civil Amas de Casa, de Villa Gobernador G?lvez.
En esa misma l?nea, Gabriela Sosa, coordinadora del espacio de mujeres Las Juanas, del Movimiento Libres del Sur, resalta la importancia de lograr acuerdos por encima de las diferencias. ?M?s all? de las diferencias de posici?n que hay en las comisiones, prima el objetivo de lograr el encuentro. Se trasciende la coyuntura pol?tica de cada etapa, mas all? de que cada organizaci?n haga su planteo. Incluso creo que los gobiernos se han perdido un espacio de disputa, porque no lo consideran trascendente?, expresa.
Por su parte, dentro del desaf?o que implica el hecho de construir desde la diversidad, Noem? Chiarotti, integrante Indeso Mujer, opina: ?La horizontalidad y la pluralidad no es f?cil, es un proceso de construcci?n colectiva que necesita de la tolerancia y la capacidad de aceptar la diversidad, y esto entra en contradicci?n muchas veces cuando hay mujeres de partidos pol?ticos que vienen con consignas partidarias que quieren imponer, pero a pesar de todo en mi experiencia personal de haber participado en dos Comisiones del Encuentro, creo que lo logramos?.
En este sentido, Graciela Nu?o, integrante de la Secretar?a de Cultura de Amsafe, opina que de alguna manera, desde que se constituye dicha Comisi?n ya empieza a haber ?encuentro? por sus caracter?sticas de funcionamiento: ?Hay una din?mica particular, hay cien mujeres de todos los colores y con distintos ejes, se hace una discusi?n general sobre la que se arma consenso y despu?s discusiones particulares por comisiones. Luego cada comisi?n trae lo que acord? a la comisi?n grande y se vuelve a consensuar, se decide en la asamblea general. Es un estilo muy democr?tico que se refleja de igual manera en el desarrollo del encuentro?, expresa Graciela.
Entre recuerdos y an?cdotas, caf? en mano transcurre la charla, reflejando la misma heterogeneidad de aquella Comisi?n, que se reun?a en la sede de Gobierno de la Universidad Nacional de Rosario (UNR), dispuesta a brindarle la mejor bienvenida y estad?a a las miles de compa?eras que llegar?an a nuestra ciudad para participar del XVIII ENM.
Las cuatro mujeres coinciden en que ?algo cambia en cada mujer que participa?, y comentan que esto ha quedado sucesivamente expresado en las experiencias dadas en los barrios, al interior de las organizaciones y en ?mbitos familiares al regreso de los encuentros.
Acuerdan en que muchas cosas se modifican para quienes quiz?s por primera vez salen del barrio, del campo o de parajes rec?nditos hacia otras provincias. En que muchas cosas cambian cuando se abre la posibilidad de salir al encuentro con tantas otras realidades diferentes a la propia, pero no tanto.
?La experiencia por ejemplo de escuchar en los talleres c?mo son las condiciones de explotaci?n de las mujeres que recolectan cebollas en el norte, o manzanas en Neuqu?n, no lo podes creer sino lo escuch?s en el mismo relato. O las obreras del pescado de Mar del Plata, que contaban a la temperatura que laburaban y en las terribles condiciones. Esas minas, adem?s iban al encuentro, haciendo un esfuerzo incre?ble?, opinan entretejiendo puntos de vista. ?Recuerdo a una chica que dijo que jam?s hab?a podido decir que era homosexual, hasta que particip? del encuentro?, agrega Laura. ?Tambi?n a una chica aborigen diciendo que era la primera vez de su vida que hablaba, porque siempre hablaba el marido?, agrega Graciela.
Acuerdos sobre los contenidos
Para garantizar la cobertura de todas las necesidades del Encuentro, dentro de la Comisi?n Organizadora existen comisiones tem?ticas, de alojamiento, de traslado, prensa y contenidos, entre otras. En esta ?ltima se evidencia con claridad la construcci?n desde las diferencias, los posicionamientos tanto ideol?gicos como pol?ticos.
?Un factor importante es la cuesti?n del contenido en s? mismo, un encuentro donde lo que abunda es la diversidad y esto es lo interesante porque lo que debe contener el temario es reflejar esa diversidad y c?mo nosotras como mujeres vamos desentra?ando los temas y nos situamos dentro de ellos y analizamos c?mo nos contiene, c?mo nos afectan, c?mo incidimos, qu? estrategias tenemos que darnos para ser protagonistas en cada uno de los espacios con poder para decidir c?mo queremos el cambio por el cual estamos luchando?, subraya Noem?.
Asimismo recuerda que en 2003 se logr? un avance significativo con respecto a la discusi?n del aborto, uno de los temas fuertemente resistidos desde la Iglesia Cat?lica, cuando se acord? agregar el taller Estrategias para el acceso al aborto legal, seguro y gratuito. ?En los encuentros anteriores fue dif?cil avanzar en el tema, porque siempre se terminaba discutiendo sobre si el feto era persona o no. Entonces al agregar este taller se part?a de un piso, se part?a del convencimiento de la necesidad de evitar m?s muertes de mujeres, sobre todo las m?s pobres, es decir de la necesidad de tener leyes que garanticen el aborto legal, seguro y gratuito, y se propon?a una discusi?n sobre que estrategias deber?a darse el Movimiento de Mujeres para conseguirla?, referencia.
Pasar la posta...
Dentro de este nuevo tipo de construcci?n de poder, horizontal, plural y participativo, que tiene como protagonistas a amplios sectores del campo social, se jerarquizan las historias de vidas, la singularidad de cada realidad, las m?ltiples formas de resistencia y se le da un valor preponderante a la experiencia vivida, en el marco de un proceso de liberaci?n y conciencia individual y colectiva.
En este sentido, una vez finalizados los encuentros, a?o tras a?o, a la Comisi?n Organizadora le toca compartir su experiencia con la comisi?n venidera, aportando sugerencias, opciones, cuestiones del propio recorrido que puedan resultar ?tiles de considerar. ?La instancia de transmisi?n es perfecta. Un mes antes del encuentro se hace una reuni?n de comisiones organizadoras anteriores, tratando de transmitir las experiencias anteriores a las actuales?, cuenta Graciela. ?Me acuerdo que en la de Rosario nos ayud? a destrabarnos con una cuesti?n del programa. Fui a dos reuniones previas de comisiones a pasar la posta: Mendoza y Tucum?n, estas reuniones son muy ricas, y hacen a la esencia del significado del encuentro como experiencia colectiva?, explica Laura.
Un hecho pol?tico contundente
?Qu? significa el ENM para el Movimiento de Mujeres de nuestro
pa?s?, fue una de las ?ltimas reflexiones que compartimos en esta
conversaci?n.
?Los Encuentros Nacionales son las Plenarias Anuales del Movimiento de
Mujeres en Argentina. La persistencia durante 24 a?os, con una
participaci?n masiva de miles de mujeres de todas las provincias es un
hecho pol?tico contundente. Los encuentros generaron la formaci?n de
much?simos grupos de mujeres, es un movimiento vivo, masivo, con las
posibilidades de enriquecerse en cada uno de ellos, de juntarse y fijar
estrategias, acciones y actividades con mujeres de otros lugares?,
sostuvo Noem? Chiarotti.
?Me parece que es un espacio donde las mujeres se potencian para salir
a luchar, ganan en conciencia, protagonismo, en decisi?n, en buscar a
otras mujeres... es una relaci?n dial?ctica entre ellas en lo
particular y con el conjunto?, consider? Graciela Nu?o.
?Para m? es una gran escuela, ah? aprendemos lo que realmente pasa en
el pa?s. Todas mostramos c?mo hacemos para encontrarle la vuelta a la
lucha. Es un term?metro de las problem?ticas m?s grandes de las
mujeres. Por otro lado, es imposible que lo rompan o destruyan: ?qui?n
les quita a las mujeres en cada lugar, en cada barrio, que tres meses
antes empiecen con la venta de empanadas para viajar adonde toque la
pr?xima??, expres? Laura Delmonte.
?Creo que son como dos planos, las organizaciones crecen, toman el tema
como propio. En lo ideol?gico, como en las relaciones con otros. El
otro plano es social, se empiezan a instalar en los lugares consenso de
algunas de las iniciativas abordadas en los ENM, creo que como lo han
evidenciado los encuentros, quedan desaf?os. Hay que replicar esa
metodolog?a en las provincias, un encuentro al a?o no nos alcanza para
instalar en las agendas pol?ticas todos los derechos que a?n nos faltan
conquistar. Una de las posibilidades que nos da el encuentro es empezar
a planificar en las provincias, ver c?mo construimos una agenda
concreta con lo que trajimos del Encuentro y estamos de acuerdo empezar
a hacerlo masivo?, propuso Gabriela Sosa.
Contactos:
Web: Encuentro Nacional de Mujeres
e-mail: organizacion@24-encuentromujeres.com.ar
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El Monumento a la Bandera a pleno, ENM de 2003. Foto: Rimaweb |
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Publicado el: 22/10/2009
Categor?as:
Buenas Pr?cticas / Reportaje
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