Mucho se ha dicho ya sobre el conflicto que Gobierno y entidades agropecuarias mantienen desde hace m?s de 100 d?as y que actualmente se debate en el Congreso Nacional. Sobre esto, basta con recorrer las cr?nicas, notas de opini?n y an?lisis pol?tico que, con diversos matices, han realizado los principales y masivos medios de comunicaci?n en Argentina.
Desde enREDando apelamos a las otras voces que, tierra adentro, defienden la soberan?a alimentaria, la propiedad comunitaria de los territorios y el desarrollo de una econom?a sustentable, basada en el modelo de la agricultura familiar. Estas voces se han escuchado, por cierto, bastante poco en los debates pol?ticos que los medios, en su mayor?a televisivos, han llevado a cabo como ?garantes? de una aparente democracia participativa.
Sin embargo, durante todo un d?a, en Rosario tuvo lugar un pre - encuentro que n?cleo a movimientos campesinos de diferentes puntos del pa?s: C?rdoba, Salta, Misiones, Jujuy, Santiago del Estero, Mendoza, Formosa, como as? tambi?n, a organizaciones pol?ticas de diferentes corrientes. El objetivo fue establecer puntos de encuentro para debatir aquello que tiene que ver puntualmente con la actual coyuntura pol?tica, econ?mica y social: la propiedad de la tierra y el desarrollo de un modelo agrario, muy distante al que hoy por hoy se sustenta en el monocultivo de soja transg?nica para exportaci?n.
Este pre ? encuentro tambi?n sent? las bases para lo que ser? la V Conferencia internacional de V?a Campesina (organizaci?n internacional que nuclea a movimientos campesinos de todo el mundo), en el mes de octubre y que se desarrollar? en Mozambique y la reuni?n de la regi?n Cono Sur, que tendr? lugar en nuestra ciudad entre el 12 y 14 de agosto y donde asistir?n delegados de los pa?ses sudamericanos y de v?a campesina argentina para ajustar las posiciones regionales para la conferencia internacional. Adem?s, del 10 al 12 de agosto se desarrollar? la Escuela latinoamericana de formaci?n Mujeres campesinas y Seminarios de participaci?n abierta sobre : Soberan?a Alimentaria y reforma Agraria, Territorio como conflicto, Agrocombustibles y cambio clim?tico.
Reclamos campesinos
?Tengo el pecho hinchado por este encuentro?, apunto Angel Strapazzon en di?logo con enREDando. Los principales movimientos de Argentina ? Movimiento Nacional Campesino Ind?gena, Frente Nacional Campesino, creado recientemente, y las hist?ricas Ligas Agrarias- estuvieron presentes en el sal?n del Sindicato de Prensa Rosario, debatiendo, compartiendo experiencias y delineando perspectivas conjuntas para asentar los reclamos en el debate actual. ?Estamos dando un puntapi?, este es un proceso que va a llevar un tiempo. Lo m?s urgente es tener un grupo de compa?eros que trabajen todos estos d?as para que el Parlamento reciba realmente a los que somos del campo, no a los que viven del campo, que se enriquecen y lucran con el campo. Lo m?s urgente es que no podemos estar ausentes en el debate parlamentario?, explic? Angel, referente del Mocase V?a Campesina.
El principal reclamo tiene que ver con impulsar seriamente la Ley de Bosques, aprobada en noviembre del a?o pasado y motorizada por el diputado Miguel Bonasso, ?que se paren los desmontes en la Patagonia, en el Gran Chaco Americano, en el NEA, hasta que las provincias no cumplan la reglamentaci?n de ordenamiento territorial?. Tambi?n, desde los movimientos campesinos promueven la sanci?n de diversas leyes campesinas para lograr la aprobaci?n de una moratoria a los desalojos de las comunidades, como le fue aprobada a los Pueblos Originarios.
Asimismo, cada movimiento apunt? sus propios reclamos, aunque todos ellos coinciden, por un lado, en la imperiosa necesidad de establecer un modelo agrario diferente al actual, denunciando a viva voz ? aunque sean abucheadas en el Parlamento - la realidad cada vez m?s preocupante de las comunidades y del avance sojero- y por el otro, en la falta de representatividad de Federaci?n Agraria. ?No es posible que la plata del programa que manejaba Federaci?n Agraria Argentina en el INTA, en el programa social agropecuario, en el foro de organizaciones de agricultura familiar, no es posible que la manejen quienes no nos representan?.
Este es un aspecto fundamental del reclamo y tambi?n de los diversos comunicados de repudio ante el lockaut patronal que emitieron los movimientos campesinos durante estos 100 d?as. Al respecto, Strapazzon se?al? que ?los peque?os productores son capitalistas que hacen agro-negocios. B?sicamente el modelo del peque?o productor de la FAA aprueba, consens?a, ideol?gica y econ?micamente, por tanto pol?ticamente, con los agro-negocios.?
?Las llamadas "entidades del campo" (SRA, CRA, FAA y CONINAGRO) solo pronuncian los dictados de los agro-negocios. Su s?mbolo actual es la soja transg?nica, que por su alta rentabilidad ha devastado bosques, desalojado comunidades campesinas e ind?genas, contaminado suelos y aguas, y aumentado los precios de los alimentos en el mercado interno. Nuestras comunidades se ven diariamente amenazadas por matones y topadoras que responden a esta pol?tica del "campo"?, expres? el MNCI en un comunicado emitido el pasado 26 de marzo.
Tambi?n, desde el Mocase expresaron que ?durante el paro patronal, se utiliz? como punta de lanza la situaci?n de un ?peque?o productor? con 100 hect?reas. En t?rminos puramente econ?micos: cada hect?rea se alquila a 200 pesos por mes, 20 mil pesos cada treinta d?as, 240 mil pesos al a?o s?lo por alquilar su tierra. Si este propietario es ?peque?o productor?, ?c?mo debiera llamarse a una familia campesina o ind?gena con veinte hect?reas, cien chivas y huerta para autoconsumo??.
Detr?s de la semilla
Este modelo de agro-negocios es el que ha llevado a desalojar a familias campesinas enteras, que sobreviven y resisten en los rincones de los montes que aun perduran frente al avance depredador de la semilla transg?nica, creada y patentada por Monsanto y que, al mismo tiempo, es resistente al herbicida fabricado por la propia Monsanto. ?Los agro-negocios basados en la soja transg?nica desalojaron en los ?ltimos diez a?os, a 300.000 familias de campesinos e ind?genas que fueron a engrosar los contingentes de las villas miseria. (?) El avance de la soja oblig? a desmontar 1.108.669 hect?reas de bosques en cuatro a?os. (?) Las compa??as que se han beneficiado con el negocio sojero son, por supuesto, Monsanto, pero adem?s Dupont, Syngenta, Bayer, Nidera, Cargill, Bunge, Dreyfus, Dow y Basf, entre otras?. (Fuente: P?gina 12, domingo 29 de junio de 2008, p 13).
De estas compa??as muy poco se ha hablado. Ni el gobierno ni el llamado ?campo?, representado por entidades agropecuarias, entre las que aparece la Sociedad Rural Argentina, socia, c?mplice y beneficiaria del modelo de exclusi?n social y genocidio operado a partir de los a?os de la dictadura a esta parte, han denunciado la operatividad y las ganancias extraordinarias de ?stas empresas, verdaderas responsables de los desmontes, desalojos, apropiaci?n de recursos naturales y contaminaci?n de la tierra y el agua.
Y esto preocupa porque, precisamente, es lo que aparece silenciado intencionalmente en el debate de este conflicto. ?Nosotros creemos que el gobierno, como muchos de los argentinos, en gran parte tiene una gran ignorancia de lo que es la cuesti?n campesina verdadera, el verdadero campesino, trabajador y productor de alimentos de la tierra. Campesino es el que pone las manos en la tierra, no Luciano Miguenz. El grupo familiar trabaja directamente la tierra. Es m?s, en los predios, en los lotes de estas cuatro entidades agropecuarias, gran parte la hacen empleados, trabajadores rurales, y se niegan, la misma FAA, se niega a reconocer derechos laborales, seguridad laboral al pe?n rural?, denuncia Angel, un militante que desde hace a?os recorre y pone el cuerpo en la lucha campesina de Santiago del Estero.
Por otra parte, hay un aspecto que viene siendo denunciado sistem?ticamente por los campesinos: la utilizaci?n de un agrot?xico como es el glifosato o, como se lo conoce comercialmente, el Round-up, herbicida fabricado por Monsanto. ?(?) El modelo agrario transg?nico, implantado desde 1996 en que se habilitaron para su comercializaci?n las primeras semillas de Soja RR ? Roundup Ready, resistentes al glifosato- ha provocado una fuerte agriculturizaci?n en las mejoras tierras de nuestro pa?s con fuertes desplazamientos y desalojos de poblaciones campesinas, de la ganader?a y de otras producciones como la apicultura, la artesan?a y otras formas de producci?n relacionadas con el manejo sustentable del medio ambiente. (?) A ello se debe agregar el grave da?o a la salud y a la tierra de las comunidades campesinas que son fumigadas indiscriminada e impunemente con los agrot?xicos que acompa?an el cultivo de las semillas transg?nicas.? (Documento del Frente Nacional Campesino, publicado en el suplemento CASH, P?gina 12, domingo 29 de junio de 2008, p 2).
Por su parte, en otro documento emitido por las organizaciones campesinas se afirma que en ?ste ?ltimo a?o, ?los campos argentinos fueron rociados con 165 millones de litros de glifosato, denunciado por causar malformaciones a reci?n nacidos, abortos espont?neos, c?ncer y muerte. Las acusaciones apuntan a la mayor semillera del mundo: Monsanto.? Pero claro, de esto no se habla.
En este sentido, vale mencionar algunos datos estad?sticos que denuncia, en este caso, el Mocase V?a Campesina. ?Lo reiteramos una vez m?s: el sistema de la SD-sojaRR-herbicida glifosato, destruye 4 de cada 5 puestos de trabajo existentes y s?lo crea un puesto de trabajo cada 500-600 has, siendo s?lo viables y autosuficientes para este sistema, las explotaciones que superan las 500 has seg?n la regi?n agroecol?gica. Por el contrario, la econom?a familiar genera 35 puestos de trabajo genuinos por cada 100has. Pero el gobierno debe saber que salir de la sojizaci?n implica antes que nada, redistribuir la tierra y repoblar el territorio nacional devastado por el peque?o poroto?. Esto es lo que, fundamentalmente, se le exige actualmente al gobierno nacional.
El formidable negocio de la soja RR ha avanzo sideralmente desde que fue autorizada por el gobierno de Menem en 1994, destruyendo la biodiversidad de cultivos, producciones y suelo, a causa, entre otras cosas, del sistema de siembra directa.
Tierras concentradas
6900 propietarios son due?as del 49.7% de la tierra productiva del pa?s y seg?n el Censo Agropecuario de 2002, 936 terratenientes poseen 35.515.000 Has (casi toda la superficie en cultivo), un promedio de 38.000 has c/u. Por el contrario 137.021 agricultores poseen s?lo 2.288.000 has, con un promedio de 16.7 has c/u, sostienen en un comunicado desde el Mocase, al tiempo que se denuncia, como realidad inocultable, la enorme cantidad de trabajadores en negro que posee el sector rural. ?Son echados sin indemnizaci?n y contratados en negro cuando se los necesita, muy poco tiempo por cierto. El hecho que las dos terceras partes de los trabajadores vinculados a la sojizaci?n trabajen en negro, tiene que ver a su vez con las necesidades de un negocio que evade impuestos o se realiza mayoritariamente en negro?.
La propiedad de la tierra, hoy en manos de los grandes pooles sojeros, es el debate ausente que impulsa el movimiento campesino en su conjunto, como un aspecto nodal para desarrollar un modelo agropecuario basado en la agricultura familiar. ?Nosotros estamos de acuerdo con las retenciones, en la medida que no sea una herramienta de acumulaci?n de poder pol?tico para unos pocos?, afirma Angel.
?Creemos que el mejor mecanismo que tiene la Argentina toda de indemnizar los inmensos da?os de violaci?n a los derechos humanos que ha hecho el modelo sojero contra miles de familias campesinas, con ni?os muertos, asesinados, golpeados, encarcelados, mujeres, ancianos, la mejor manera es que por lo menos el 50% de las retenciones sea para poner en marcha un desarrollo rural de la agricultura campesina y de los pueblos originarios?.
Por su parte, desde el Frente Nacional Campesino sostienen que es necesario plantear, a trav?s de pol?ticas de Estado, una seria ?defensa de los recursos naturales, sociales, culturales y ancestrales como forma de vida y continuidad de nuestra historia en el fortalecimiento de nuestras econom?as regionales, la diversificaci?n de la producci?n, la creaci?n de bancos de semilla y el desarrollo de canales de comercializaci?n alternativos. Nos asumimos como genuinos representantes del sector de los peque?os productores campesinos de la Argentina.?
?Nosotros garantizamos que si esa plata fuera a nosotros y nosotros trabaj?ramos con los municipios en salud, educaci?n, producci?n y tecnolog?a renovable, garantizar?amos los alimentos de los argentinos, para que nunca m?s los pooles de siembra y los grandes conglomerados manejen los precios de alimentos?, apunta Strapazz?n. A esto refieren fundamentalmente todas las comunidades cuando defienden, con la vida misma, el concepto de Soberan?a Alimentaria. ?A nosotros no nos interesa exportar. Queremos vender todo al pueblo argentino, y sino hubiera intermediarios y nosotros tuvi?ramos nuestras propias ferias francas y de mercado, te puedo asegurar que al consumidor le llega hasta un 70% menos hoy los alimentos.?
Suena a utop?a, pero el temperamento y la convicci?n de los campesinos, unidos a pesar de las diferencias, entusiasma y moviliza hasta al m?s pesimista. ?La expectativa que se abre es correlaci?n de fuerza y acumulaci?n de poder de lucha transformadora. Estamos todos juntos los campesinos ind?genas. Guarda, as?stense en serio, ahora s?, vamos por ellos, por los poderosos de la guita. Ellos dec?an que iban por el gobierno, nosotros vamos por ellos. Por ambos, si es necesario.?