Noviembre, calor de enero. Los barrotes tiemblan frente a la fuerza de la palabra po?tica. Los muros se derriten entre t?midas miradas, ojos negros y cuerpos tatuados. La c?rcel se difuma en un espejo de libertades encontradas.
El vuelo de la poes?a tiende un puente con un afuera imaginario, tangible e inasible al mismo tiempo. Deseos, miedos, viajes y esperanzas apretadas en un pu?o acompa?an la tibia ma?ana de noviembre. La Unidad Penitenciaria N? 3, encierro penetrado por cotidianas historias de vida, le abre sus portones grises a ?la dama de honor?. La poes?a ingresa sin dejar documentos. Se cuela por los aires h?medos de los pabellones y se posa, indescriptiblemente, en el centro del patio, el corredor por donde se pasean los sue?os de los pibes que all? pasan su tiempo marcado por las agujas de un almanaque.
Entonces, la palabra po?tica destila una bocanada de aire fresco, suave brisa de primavera. 22 poetas de todo el mundo acercan sus poes?as a ese cerco vallado de rejas y guarda-c?rceles. Y comparten sus poemas, en un min?sculo sal?n de escuela, con los chicos que participan del taller de poes?a ?Historial de Soledades? coordinado desde el a?o 2001 por la poeta Susana Valenti. Este encuentro se realiz? en el marco del Festival Internacional de Poes?a y es el segundo a?o consecutivo que se lleva a cabo. enREDando comparti? la ma?ana con escritores internacionales y aquellos otros poetas quienes, detr?s de un muro, apuestan a la poes?a para hacer presente la ansiada libertad. Cuesta, pero a trav?s del poema, los paredones se desvanecen y el ser amado, la familia, el paisaje, lo cotidiano, los hijos y la calle aparecen como r?fagas de esperanza en una hoja de papel. Ellos, los pibes de la ?tres? compartieron sus poemas junto a los poetas del Festival y el arte, entonces, se burl? del sistema una vez m?s.
No hubo barrotes, tampoco muros. No hubo silencios impuestos ni distancias obligadas. Lo que aconteci? fue la magia del silencio necesario ante la escucha, la emoci?n de una poeta sensible como Susana Valenti, el aplauso infinito de todos los presentes, los nervios propios de la lectura en p?blico y el puente vital para construir nuevos mundos, ?nicamente posibles a trav?s del ?arma m?s in?til que hasta puede salvar el mundo?; la poes?a.
Ellos
?La poes?a es resistir porque muchas veces uno cuando cae en estas circunstancias y se encuentra privado de su libertad, uno tiene mucho tiempo para pensar, es un momento que te atrapa y se puede salir. Me hace viajar a otro lado, yo estoy ac?, pero mi mente anda por todos lados. Es la libertad que uno tanto anhela. Est? bueno que gente de otro lado venga y compartamos los poemas, capaz que ellos tienen un prejuicio hacia nosotros y no nos conocen, esta bueno que entren y que vean que no somos malas personas. Hay gente capaz de escribir y a trav?s de una poes?a expresar lo que uno siente?. Estas palabras son de Diego Silva, uno de los chicos detenidos de la U3 que desde hace un tiempo apuesta a la pluma de la escritura para volar; con su palabra traspasa lo herm?tico del muro.
Nada impide que mis pensamientos
naufraguen hacia lo inevitable
Cuando el aire
se hace menos luminoso
y la brisa invisible se torna silenciosa
algo traspasa lo herm?tico del muro
y cavilosamente, logro desenlazarme.
Elijo la distancia
para atravesar el infitino sol,
sigo mis sue?os que declinan hacia ti
y me adormezco junto al r?o.
La tierra oscura gira.
Se hace largo el viaje hacia tus manos
por eso las sombras hieren como una espada.
Mis ojos intentan descubrir tu frente
mientras la luna se hace intensa.
Nada impide que mis pensamientos,
entre el fuego y el agua,
naveguen hacia la libertad.
...
?La poes?a es la ?nica salida de la mente para vencer el muro. Es un rinc?n luminoso donde nadie puede hallarnos?. As? define a la poes?a, Leonardo Arancet. ?Escribo sobre los amigos, la familia y esta muy bueno que vengan poetas de otros pa?ses. Que las personas que no est?n encerradas tengan una mirada sobre esto, aunque no lo hayan pasado.? Leonardo recorre su historia a trav?s de un pulso fugitivo que marcha lento, demasiado para su gusto.
Una estrella respira al borde de la noche.
Mi pulso se torna fugitivo, sin encanto.
Cu?ndo volver? a jugar con mi inocencia
o con el ni?o que se perdio en esa foto que no he visto.
Soy un transe?te.
Camino con los personjaes perdidos de mi historia
por esta vereda estrecha.
Tal vez sea un pasajero de este mundo,
pero no lo ser? en el tuyo.
Hay una nostalgia tan futura que me invade.
Sin embargo, marcho tranquilo.
Demasiado para mi gusto.
...
?La poes?a te saca de este lugar, te hace traspasar los muros. Por medio de la palabra uno encuentra la libertad que ac? dentro no ten?s. Escribo mucho sobre los paisajes, sobre las cosas que me generan libertad, fuera de este lugar. Mi mente se traslada afuera?. Ariel Mascchio comenz? a acercarse al taller de poes?a lentamente. ?Me fui metiendo cada vez m?s y tengo un mont?n escritos. Para mi este encuentro es muy importante, viene gente de la calle, de distintos lugares y ac? adentro nadie se acuerda de nosotros. Pero por medio de Susana Valenti tenemos la suerte de compartir nuestros poemas con otra gente y nos sirve para trata de salir adelante?.
...
?La poes?a es muy lindo que me ayuda a poder expresarme, desahogarme de cosas personales. Me ayuda a volar. Tenemos una pasi?n, que es la poes?a. Le escribo a un hermano m?o que falleci?, a mi hija que tiene 3 a?os, cosas que viv?a cuando era chico, esa etapa de la vida que vuelvo sobre alguna poes?a trabajada. Despu?s otro puede leer otra cosa, otro espejo? Para Enrique estos espacios son interesantes porque ?te abre la mente. Al taller me acerqu? para ver de qu? se trataba, como muchos, solo sabemos escribir una carta, al menos yo como muchos jam?s leemos poes?a. Pero con el amor de Susana, que siempre est?, nos pudo sacar lo que realmente ten?amos para desarrollar. Y nos ayuda mucho. Nosotros si nos podemos capacitar para escribir algo, tambi?n podemos aprender otras cosas.?
...
Marcos Z?rate tiene 31 a?os y est? preso en la Unidad 3. ?La poes?a es so?ar y creer en lo que uno escribe. Yo quiero escribir un libro que se va a llamar ?La cruel infancia Argentina?, una biograf?a. Es un libro mezclado y por eso le pido ayuda a Susana. La infancia me ha golpeado mucho, pero me gusta tambi?n escribir sobre el amor, los sue?os, sobre mi hija.? Luchando, Marcos no deja de asistir desde hace 2 a?os al taller de poes?a. ?Creo que es importante para todos. Estar entre todos los poetas conocidos es algo inalcanzable, pero si nos esforzamos a escribir podemos. Tenemos el tiempo para practicar y escribir.? Y as? escribe este poeta, que entre muros y barrotes, sue?a con los ojos de una amada en una noche de tormenta.
Tu cara se marchita. No es la misma.
Todo esplendor se olvida
menos aqu?l que va agitando el alma.
Todo se hace desierto
si la lluvia no viene
menos tus ojos que son los mismos
y no apagan su fuego
en esta noche de tormenta
...
Hern?n Gauto lee su poema ?Dejar al descubierto?, una apuesta a la libertad y a la esperanza s?rdida de alguien que tiene los pies sobre la tierra. ?No hay que bajar los brazos, sobretodo estando ac? adentro. La poes?a es necesaria en las c?rceles. Para m? este encuentro es grande, me identifico con toda esta gente y no pienso que estoy privado de mi libertad?.
El tiempo siempre deja se?ales
que encienden huellas de visibles tropiezos.
Entre realidades y lejan?as
los hechos se ajustan
a f?rmulas imaginarias.
El camino
sigue siendo oscuro.
Pero de esa ausencia, de ese desconsuelo
retorno.
Bajo mi voz perdida
estoy de pie.
...
Para Roberto Carli la poes?a "es traspasar este mundo, salir afuera y que nuestras poes?as puedan llegar a tocar los corazones de la gente y que sepan que ac? dentro hay personas con sentimientos.Me gusta escribir sobre la libertad porque es lo que quiero alcanzar. Quisiera llegar a editar mi propio libro. Los talleres son importantes y son necesarios, se tienen que promocionar y los gobiernos se comprometan con presupuestos m?s grandes para que haya gente que pueda venir a estos lugares a ense?ar y que la gente de aca dentro pueda aprender y pueda salir a hacer una mejor vida afuera".
Las primeras sombras
van guiando las calles.
La misma soledad cae sobre la muchedumbre.
Yo tambi?n puedo salir al mundo.
en mi armario secreto
descubro alguna estrella.
La pared es el l?mite,
pero mi mente ignora el riesgo
y se muda de una intemperie
a otra.
A veces, desaparezco.
Vagar es, para m?,
una mentira necesaria.
Ella
Susana Valenti comenz? agradeciendo a todos los que se acercaron a compartir el encuentro. ?Hoy ingres? al penal la palabra po?tica, la dama de honor. Algunos ya no est?n, muchos est?n en libertan y otros no est?n, pero siempre digo que sus voces van quedando en estas paredes.?
Este segundo encuentro donde poetas extranjeros ingresan a la Unidad 3 la conmovi? profundamente. ?Siempre he cre?do en que la palabra po?tica tiene un valor fraterno y tiene un valor que abraza, enlaza y que la patria de la poes?a es el mundo, porque no es un hecho menor que entren poetas del mundo de afuera al penal, pero adem?s, entran poetas de distintas latitudes, pa?ses, culturas, idiomas, vengan a Rosario y tambi?n quieran disfrutar y conmoverse con este encuentro con los chicos que est?n privados de la libertad. Los que creemos en el sagrado juego de la palabra po?tica nos sentimos orgullosos, gratificados y emocionados, porque en Rosario siempre decimos y esto se confirma que la poes?a sopla donde quiere?.
Las historias se cruzan y en este espacio, los de afuera dejaron de lado su propio encierro, y los de adentro, durante toda una ma?ana, se sintieron libres. Paradojas que solo la palabra po?tica y la esencia del poema hacen posible. ?Muchos poetas apuntaban a que la libertad casi no existe, es casi una utop?a, como pregunt?ndose, muchos estamos afuera pero ?estamos realmente libres? Y eso es un buen mensaje para los chicos, no es un consuelo, pero es un gran mensaje para quienes padecen la falta de libertad real, de no poder ir m?s all? de una reja.?
Entre todos
La ma?ana transcurri? entre la lectura profunda de un poeta y el silencio buscado de una escucha. As? se creo y se tejio un vaiven de poemas de escritores belgas, venezolanos, brasileros, peruanos, uruguayos, mexicanos, noruegos, argentinos; de escritores que escriben entre ?penitencias y amaneceres?.
Roc?o es una poeta y periodista peruana que lleva tiempo realizando un taller de escritura en una c?rcel de m?xima de seguridad de mujeres del Per?. Su lectura fue un poema escrito por una mujer privada de su libertad. ?Esa c?rcel se abrio para agrupar a presas que son condenadas por terrorismo que son la mayor?a de Sendero Luminoso. El taller que yo hago no se centra en la poes?a, sino en la parte testimonial. Alla es muy dificil entrar. Las condiciones de las c?rceles son muy duras. La palabra ocupa un lugar importante. Es el espacio donde ellas pueden simbolizar sus experiencias anteriores y pueden hacer memoria y tomnar conciencia de lo que han pasado. Muchas de ellas est?n en cadena perpetua.?
Marit, una poeta noruega, recit? un poema con la contundencia de las palabras breves, justas y necesarias. Un poeta Belga regal? una poes?a que habla de la experiencia, del propio reconocimiento del ser, mientras otro sentenci? con palabras este encuentro ?adentro y afuera lo ?nico que hacemos es resistir?, dijo Andr?s Cursaro, poeta neuquino.
La poes?a como un acto de esperanza y la sensaci?n de que unos y otros, afuera y adentro, viven sus propios encierros enlazaron las escenas po?ticas del encuentro en la Unidad 3. Una emocionada Susana Valenti abrazaba a cada uno de sus chicos mientras ellos le?an sus obras po?ticas y los aplausos se fund?an en un registro ?nico.
Valen la pena estos encuentros para creer que no todo tiene que ver con leyes, expedientes y sistemas de conductas y conceptos. Hay pibes que est?n, a?n en las peores condiciones, peleando por ser libres y dibujando en un papel, palabras que traspasan la muralla para vencer la desesperanza que colma el aire de afuera. Y es necesario saberlo.