Poco sabe el rosarino
medio de Luxemburgo. Salvo en el barrio Bella Vista Oeste, donde se conoce m?s
del peque?o pa?s europeo porque all? desarrolla sus m?ltiples actividades
la Asociaci?n Mutual de Ayuda al Pr?jimo Casa de Luxemburgo, organizaci?n que
comenz? como intermediaria de becas de estudio para ni?os y j?venes de la zona
pero que por estos d?as, siempre a trav?s del trabajo conjunto con la
organizaci?n H?llef fir Rosario de Luxemburgo, despliega una labor mucho m?s
amplia de promoci?n social de la gente de la zona. Hoy, Casa de Luxemburgo
tiene cuatro sedes, todas en Bella Vista. Todo empez? en 1988, a
partir de la iniciativa de la iglesia Bautista de Pellegrini y Lavalle, que
impuls? un trabajo social desde una capilla en Pascual Rosas al 1900. El pastor
que encabez? aquella misi?n contaba con el apoyo de sus familiares en Europa, y
fue Alicia Staus Franz la que propuso conformar dos organizaciones no
gubernamentales, una aqu? en Rosario y otra en Luxemburgo, donde ella vive, para
desarrollar y consolidar ese incipiente trabajo social.
"Comenzaron con
una ayuda muy directa de becas de estudio para chicos argentinos, con dinero
aportado por madrinas de Luxemburgo", recuerda Delia de Ragni,
presidenta de la comisi?n directiva de la organizaci?n de Bella
Vista. Y Adrina, tambi?n integrante de la comisi?n, agrega: "la idea de
ellos era ayudar a estudiantes que vivieran en la villa de emergencia
ubicada bien enfrente de donde nosotros est?bamos ayudando hasta ese
momento a nivel espiritual, con cierta ayuda en la educaci?n, en la higiene, en
las responsabilidades. Nos pidieron que eligi?ramos cinco familias, ellos ten?an
all? cinco se?oras que estaban dispuestas a enviar mensualmente un dinero para
ayudarlos en los gastos escolares, y as? comenz? el sistema de becas que en
la actualidad tiene 320 chicos y ha tenido otros 300".
Pero adem?s, en las distintas sedes de la
organizaci?n funcionan talleres de capacitaci?n laboral; costura, corte y
confecci?n; tejido; cocina; artesan?as; un gabinete interdisciplinario de
protecci?n legal, social y psicol?gica mediante un convenio con la Escuela de
Trabajo Social de la Universidad Nacional de Rosario, un banco ortop?dico, una
proveedur?a escolar; una biblioteca popular; un taller de computaci?n; un centro
de alfabetizaci?n de adultos y un centro de apoyo escolar; el jard?n de infantes
Cari?ito-escuela particular autorizada 1433 al que concurren m?s de cien
chicos de hasta cinco a?os; programas y talleres de reflexi?n sobre distintos
temas como procreaci?n responsable, eduaci?n para la salud, igualdad de
oportunidades, ejercicio de los derechos y deberes c?vicos, derechos de la
ni?a y el ni?o, autoestima, problemas del barrio,
violencia, perfeccionamiento docente. Tambi?n funcionan un club de madres,
un club de abuelos y un centro de amigos; una biblioteca infantil y
pedag?gica; talleres de teatro, t?teres, arte; un departamento de
recreaci?n; huerta y jardiner?a.? Adem?s, desde Casa de Luxemburgo
se sostiene un plan alimentario que favorece a 300 familias con la entrega
diaria de un kilo de pan y semanal de una caja de leche en polvo. Ese pan se
produce desde la organizaci?n, que cuenta con un taller de capacitaci?n en
panificaci?n y pasteler?a. Tambi?n se brinda orientaci?n para la creaci?n de
microemprendimientos y se impulsaron un club de trueque y una pre-cooperativa de
consumo.
En cuanto a las becas de estudio, el
monto m?nimo es de 75 pesos mensuales. Pero las mayor?a de los padrinos de
Luxemburgo env?a a sus ahijados bastante m?s. Y varios de los becados
-muchos llegaron a completar sus estudios universitarios- pudieron
incluso viajar a Europa invitados por los padrinos. "Casi un cuento de
hadas", define Delia. A cambio de las becas, los estudiantes y
sus familiares cumplen con trabajos comunitarios en la organizaci?n.
A la hora de hablar del sentido que
orienta tanta actividad, Delia remarca que una de las condiciones que
pusieron desde Luxemburgo fue que la organizaci?n explicitara en su
estatuto su prescindencia religiosa y pol?tica. "Vamos tratando de satisfacer
las necesidades que van surgiendo -explica-. Uno puede tener una filosof?a de
descargar en el estado todo, cruzarse de brazos y no hacer nada esperando que el
estado lo haga. No est? en nuestra idiosincracia eso. Nosotros pensamos que el
amor al pr?jimo tiene que trasuntarse en hacer algo por el pr?jimo. Yo no puedo
decirle ay, me gustar?a que comieras, que el gobierno te diera la comida.
Nosotros sabemos las obligaciones del estado, tambi?n vemos que el estado en
este momento no responde, no sabemos cuando podr? responder, pero mientras tanto
la persona que est? a mi lado merece que me ocupe de ella. Nuestra instituci?n
no puede parar porque surgi? por necesidades, y siguen surgiendo
necesidades".
Delia destaca adem?s la intenci?n de Casa de Luxemburgo de ir
formando a j?venes
y a gente "vinculada con la
comunidad" de la zona de Bella Vista, porque "el deseo no es venir de afuera
ac?, sino que de ac? mismo surjan los l?deres; ya tenemos incorporados en la
actual comisi?n directiva dos chicos que han sido becados nuestros y han temrinado sus
estudios, que residen ac? en la zona; y tenemos dos profesoras
madres de becados y un muchacho que es un obrero de ac? de la zona.
Tenemos cinco integrantes de comisi?n directiva que son producto de la
comunidad, que se han superado, est?n capacitados". Otro ejemplo en ese sentido
que se?ala Delia es la directora del jard?n de infantes, tambi?n
becada.
"Trabajamos proyectos de desarrollo a
trav?s de la educaci?n, del trabajo social. Un cincuenta por ciento de los
fondos para estos proyectos los ofrece el gobierno de Luxemburgo,
un cuarente por ciento H?llef fir Rosario y un diez por ciento nosotros.
Ese diez por ciento nos cuesta mucho sacrificio, pero se consigue", cuenta
la titular de la instituci?n, que indica que Casa de Luxemburgo
trabaja sin ning?n subsidio estatal m?s que un aporte de la
Municipalidad en el marco del Programa Crecer. En este sentido, Delia se queja
de "la falta de visi?n y de comunicaci?n" del gobierno provincial, al que desde
Bella Vista oeste vienen pidiendo que el jard?n, que funciona como escuela
particular autorizada, pase a la categor?a de incorporada, lo que significar?a
que el estado se haga cargo del pago de los salarios al personal docente, para
lo que ya no llega ning?n aporte de Luxemburgo. "Desde el ministerio de
Educaci?n nos contestaron que para habernos autorizado ten?amos que demostrar
que ten?amos capacidad econ?mica, y que si no ten?amos la capacidad econ?mica
nos cerraban la autorizaci?n, esa fue la respuesta", lamenta.
Delia rescata el valor que dan al trabajo
en rede con escuelas y dependencias municipales de la zona. "A la escuela
Pizzurno la gente de Luxemburgo la visit? y hace diez a?os que se
la est? ayudando con fotocopiadoras, muebles, de 800 a mil pares de
zapatillas por a?o, m?quinas de coser", comenta.
Y a?ade que la necesidad m?s importante
que por estos d?as surge desde la comunidad est? vinculada a la salud. Es que en
el barrio "no hay servicios nocturnos de ning?n tipo, no hay tel?fonos
accesibles, no hay transporte y la atenci?n odont?logica es pr?cticamente
nula". Al respecto, desde Casa de Luxemburgo ya se pidi? una reuni?n con D?bora
Ferrandini, de la Secretar?a de Salud municipal. Otra de las inquietudes
actuales es la situaci?n de los adolescentes.
"Vamos tratando de satisfacer las
necesidades que van surgiendo", repite Delia. "A la asistencialidad, desde un
principio, no la entendimos como beneficiencia, sino como ayuda mutua: queremos
que haya autogesti?n y participaci?n", concluye.
Asociaci?n Mutual de Ayuda al Pr?jimo
"Casa de Luxemburgo"
Pasaje Mansilla 4761 - Rosario
Tel?fono: 0341 - 4331942
amap@ciudad.com.ar