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Coordinadora de Trabajo Carcelario
Sin lugar en el mundo

Catorce a?os despu?s de haberse constituido, la organizaci?n sigue trabajando para bajar el nivel de riesgo en los conflictos dados en lugares de encierro, y exigiendo al Estado un trato humano para las personas privadas de la libertad, como a las visitas. Denuncian la desidia del gobierno provincial para resolver la situaci?n del IRAR y los eufemismos discursivos que minimizan la grave crisis carcelaria en general.

No son pocos los temas que hoy por hoy mantienen ocupados y preocupados a los integrantes de la Coordinadora de Trabajo Carcelario (CTC), sobre todo considerando que en las instituciones carcelarias (inhabitables de por s?) son constantes las situaciones de abusos de poder y malos tratos. A lo largo de catorce a?os de intervenci?n y mediaci?n en conflictos, la CTC se ha legitimado como un actor fundamental en la institucionalizaci?n de demandas de los/as internos/as. En di?logo con enREDando sus referentes nos cuentan en qu? anda la organizaci?n.

?Es terrible toda la situaci?n, con el tiempo, y al ser pr?cticas sistem?ticas por parte de las fuerzas de seguridad, los mismos presos terminan naturalizando ser sometidos a ellas. Ahora su preocupaci?n es por el trato a la familia, las personas son dejadas desnudas, puestas de rodillas con las piernas cruzadas, las pisan, les rompen las cosas?, relata Carmen Maidagan, abogada de la CTC, parte de la realidad que se vive en la Alcaid?a de Rosario. ?A las mujeres las hacen entrar con polleras largas hasta el suelo y con ojotas, tambi?n a las nenas. Si la ropa interior es negra no pasa, la revisada que les hacen a los beb?s tambi?n es complicada. Es tan violenta la situaci?n que muchos familiares no van, y otros dejaron de llevar a los chicos?, agrega Lilian Echegoy, docente y una de las fundadoras de la organizaci?n.

A medida que la charla transcurre y que las descripciones de Carmen y Lilian se hacen m?s detalladas, el grado de severidad de las escenas nos retrotrae a la ?poca medieval. Cuerpos sometidos a normas disciplinares. Incomunicaci?n. Aislamiento. Fr?o que se solidifica en los huesos. Aguas servidas. Todo un sistema de degradaci?n puesto al servicio del castigo. Hablar hoy de condiciones de encierro dignas, contempladas como derechos humanos en tratados internacionales, sigue siendo una lejana pretensi?n.

El atropello que sufren los familiares de los presos de la alcaid?a de la Unidad Regional II de Polic?a es uno de los temas sobre los que est?n trabajando en este momento, junto con la falta de comunicaci?n de los detenidos, planteo que ya realizaron al Director. ?Su v?nculo con la familia es tambi?n su v?nculo con el afuera, m?s a?n considerando que no tienen un tel?fono, ni radio, ni televisor. Desde el punto de vista de lo que es la tortura psicol?gica el aislamiento temporal es grav?simo?, analiza Maidagan.

En algunos pabellones de la alcaid?a las condiciones son tan miserables que los mismos internos los llaman ?contenedores?. Y la cruda expresi?n una vez m?s ratifica el lugar pol?tico y social que se les brinda a quienes son reclutados en ?instituciones de recuperaci?n?, uno de los primeros eufemismos de la historia mundial.

?El desentendimiento de las autoridades pol?ticas tambi?n se ve en que los presos nos advierten sobre la falta de colchones y frazadas y que est?n durmiendo sobre una tarima. La autoridad de la Alcaid?a dice que se entregaron 100 colchones en diciembre de 2007, la capacidad es de 300, y que no van a entregar m?s. Hay una gran desidia con lo que est? pasando. La idea que manifiestan de alg?n modo los funcionarios es que todo se mantenga como si nada pasara, que no se sepa, y las cosas que est?n pasando son muy preocupantes?, advierten intranquilas.

?Cuando empezamos a recibir denuncias de Alcaid?a y a tener contacto con los familiares, pedimos una entrevista con el ministro de Seguridad Daniel Cuenca, nos atendi? Iparraguirre (secretario), no solucion? absolutamente nada. Podemos hablar mejor con los jefes de las distintas instituciones que con Juan Lewis (subsecretario de Asuntos Penales)?, manifiestan las militantes de la CTC.

En el IRAR, todo mal

Entre sus acciones, la organizaci?n visita semanalmente e interviene en el Instituto de Rehabilitaci?n de Adolescentes de Rosario (IRAR), donde actualmente est?n alojados 43 chicos de entre 16 y 18 a?os. ?En realidad en las condiciones que est? el IRAR hoy, se puede hacer poco y nada. Los pibes hoy est?n peor que en la gesti?n anterior, est?n mucho m?s encerrados?, opinan.

El IRAR es una de las instituciones de encierro con mayores irregularidades y m?s cuestionadas de la provincia. Actualmente no tiene un Director Civil, s?lo cuenta con la direcci?n del Servicio Penitenciario. El a?o pasado, la ONG elev? un informe a la Comisi?n Interamericana de Derechos Humanos sobre torturas a los adolescentes privados de la libertad en la instituci?n, all? se puntualizan datos de las pr?cticas denunciadas y derivadas a los distintos juzgados por los mismos chicos o sus familiares. La realidad del IRAR poco tiene que ver con la protecci?n que el Estado debe, y est? obligado por ley (N? 26061) a brindar a los menores en conflicto con la ley penal.

En abril de 2007 all? dentro muri? el joven N?stor Salto, por quemaduras y ?de forma accidental?, sobre la causa el juez dict? la falta de m?rito y el caso se cerr? sin procesamientos. En marzo de este a?o, la salvaje golpiza que un grupo de detenidos le dio a Claudio, estuvo a punto de terminar con la vida del adolescente. Aunque la versi?n oficial de cerrar la instituci?n es de p?blico conocimiento, tal decisi?n no encuentra una concreci?n.

?Son versiones oficiales. Lo ?ltimo que hicieron es un muro inmenso alrededor, tapiaron. Contrariamente al proyecto que dicen tener, est?n encerrando m?s a los pibes. Nuestros compa?eros, la semana pasada planteaban que hab?a un grupo de chicos que estaba encerrado totalmente, que no ten?an salidas al patio, que estaban casi sin actividades, que la suciedad y el abandono es muy grande?, contin?an denunciando desde la CTC.

A fuerza de constancia
Pasaron ya muchos a?os y gestiones pol?ticas desde aquellos primeros intentos de mediaci?n que la ONG realizara en diferentes unidades penitenciarias de la provincia, y de los tantos esfuerzos para lograr intervenir. La responsabilidad en el abordaje de los conflictos es hoy su mejor carta de presentaci?n.

?Ahora las denuncias nos llegan, nos avisan los familiares, los internos. Hay cosas que las solucionamos por tel?fono, con lo m?s grave es necesaria nuestra presencia. Desde la CTC siempre cuidamos la constancia en el v?nculo con los detenidos, es una obligaci?n moral de la militancia, uno tom? este compromiso y hay que cumplirlo. El pibe que te llama est? esperando que le des una soluci?n, m?s a?n cuando est?n tan acostumbrados a que vaya gente a hacer propuestas y a dejarlos con las expectativas?, sostienen.

Otra de sus conquistas es la institucionalizaci?n de las Mesas de Di?logo, desde las que se logran acuerdos y que vienen funcionando bien. ?Participan los delegados por pabell?n, las autoridades penitenciarias, nosotros, y veces la pastoral. Es un espacio a sostener, nosotros las propusimos cuando Fernando Ros?a era director. En esta gesti?n generaron mesas en lugares donde no hab?a, las generalizaron a todas las Unidades, esto es muy importante?, eval?an Carmen y Lilian.

Otro de los espacios en los que viene participando la CTC son los debates intersectoriales por la implementaci?n del Protocolo contra la tortura. El a?o pasado, junto a organismos de todo el pa?s presentaron a la legislatura un Proyecto de ley que actualmente se encuentra en discusi?n.

Contactos:
Zeballos 1410 (Rosario)
TE: 0341 - 4450082
0341 - 156 422 607




Lilian Echegoy y Carmen Maidagan, integrantes de la CTC


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Publicado el: 08/08/2009


Categor?as:
Buenas Pr?cticas / Reportaje

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